Pedro Salazar Gutiérrez, uno de los últimos hablantes del ixcateco, una lengua indígena de Oaxaca en peligro de desaparecer, murió a los 95 años de edad en su natal Santa María Ixcatlán, región de la Mixteca.
Según informes del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali), don Pedro era promotor y férreo defensor de su lengua materna, que fue reconocido por su trabajo por diferentes organismos de preservación y defensa de la cultura popular.
Salazar Gutiérrez, por ser uno de los últimos hablantes fluidos de su lengua materna, también conocida como Xjuani, fue colaborador del Centro Profesional Indígena de Asesoría, Defensa y Traducción (Cepiadet).
Hasta el 2019, el INALI tenía identificado que eran solamente 10 personas hablantes del ixcateco, entre ellos, estaba Don Pedro.
Por eso, debido a los pocos hablantes fluidos que siguen con vida, se considera en peligro de extinción.
En ese mismo año, Salazar Gutiérrez participó en la presentación del libro “Fábulas de Esopo” escrito en ixcateco, que fue editado con fines preservativos de esa lengua indígena.
El libro pudo ser publicado gracias a la asesoría de Don Pedro, quien junto a otros ancianos, ayudó a la traducción a su lengua materna de los relatos clásicos de Esopo
El ixcateco se encuentra en riesgo de desaparecer debido a que solamente no son cada vez menos las personas hablantes de manera fluida, sino también por ser una lengua que no tiene símiles.
Si bien se considera que se trata de una lengua única, el ixcateco comparte la característica tonal de otras lenguas otomangueanas, es decir, pertenecientes a la región centro de México y al norte de Costa Rica.
Don Pedro Salazar Gutiérrez nació el 19 de mayo de 1927 y falleció el 4 de enero de 2023 en Santa María Ixcatlán.
