Migrantes de diversas nacionalidades demandaron al gobierno de México reabrir la terminal de autobuses de Juchitán y no imponer la ley mediante la fuerza, como ocurre actualmente en el Istmo de Tehuantepec, ruta que utilizan para dirigirse a la frontera norte del país.
Los migrantes en tránsito piden a las autoridades mexicanas, que los dejen transitar libremente y reabrir el Centro de Movilidad Migratoria de Juchitán, pues es en este municipio donde tienen las condiciones y los servicios suficientes de bancos y tiendas para el cobro de sus remesas.
Y es que para muchos migrantes, el cobro de las remesas se ha convertido en un dolor de cabeza, pues ni en Tapanatepec, ni en ningún otro municipio, sólo en Juchitán hay suficientes tiendas para recibir su dinero.
Por esa razón, insisten que se debería reabrir el Centro de Movilidad Migratoria (CMM), pues quedó comprobado que, desde este lugar pueden viajar sin problema alguno, hacia otros destinos.
“Yo diría que por favor abran (centro de movilidad), que nos den esa oportunidad de llegar a nuestro destino. Yo quisiera que reabrieran ese servicio porque no podemos continuar así”, señaló Araceli Medrano, de Nicaragua.
Yosi Daniela Fernández, de Venezuela, dijo que desde el principio han venido caminando, pero ahora está peor la cosa por el cierre de la terminal de migrantes de Juchitán, donde pensaban abordar un autobús.
En San Pedro Tapanatepec dijo que ahí no hay lugares donde cobrar las remesas de sus familiares; sólo hay dos lugares y están saturados, por ello la necesidad de que abran de nueva cuenta la terminal migrante en Juchitán, porque acá hay más bancos y tiendas para cobrar.
“Nosotros queremos que nos abran la terminal de Juchitán, para que nos faciliten el transporte a la Ciudad de México, porque eso sería un apoyo para todos nosotros, que se pongan la mano en el corazón, porque hay niños, yo tengo las piernas reventadas, se me salieron las rodillas; niños son los que más sufren”.
“Yo diría que por favor abran (centro de movilidad), que nos den esa oportunidad de llegar a nuestro destino. Yo quisiera que reabrieran ese servicio porque no podemos continuar así”.
Araceli Medrano
Migrante de Nicaragua
