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Justicia con paridad de género, la meta de Berenice Ramírez Jiménez

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Foto(s): Luis Ignacio Velásquez
Luis Ignacio Velásquez

“Hoy es tiempo de las mujeres, por ello mi mayor propósito es promover una administración de justicia con paridad de género”, afirma convencida la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Berenice Ramírez Jiménez.

En entrevista con Noticias, Voz e Imagen de Oaxaca, expresa que todos somos importantes, pero en el caso de las mujeres es necesario romper los techos de cristal para aprovechar  las oportunidades que se les presentan en la actualidad. 

“Las mujeres y los hombres estamos a la par y tenemos que estar una al lado del otro, ambos nos necesitamos y por supuesto que es un reto, pero en el tribunal tenemos muchas áreas de oportunidad para ir cumpliendo metas y objetivos”.

Esposa, ama de casa y funcionaria pública, afirma que como mujer tiene la responsabilidad social de demostrar que puede desempeñar el cargo con profesionalidad, eficiencia y compromiso. 

“Es un reto, porque no solo soy la primera mujer en ser electa por cuatro años para presidir el tribunal, pueden venir muchas más mujeres y puedo ser yo ejemplo para muchas más que van a ocupar este cargo y, sin duda, van a generar cambios y transformaciones. Yo soy la primera, pero después de mi vendrán muchas generaciones que ya después van a decir esto es normal”.

-¿Entonces hay un compromiso de género?

-Claro que hay un compromiso de género, somos mujeres, pero sin dejar de lado a los hombres. 

En las oficinas del Consejo de la Judicatura, en la Colonia Reforma, da a conocer que desde el cargo impulsa políticas de justicia abierta, una justicia de sensibilización, una justicia de género, para ser responsables, accesibles e incluyentes.

La primera mujer electa para un periodo constitucional como presidenta del Tribunal Superior de Justicia y la más joven en ocupar la titularidad del Poder Judicial, asevera que la meta es que Oaxaca tenga una impartición de justicia imparcial, gratuita, pronta y eficiente.

Egresada de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO) y Maestra en Derecho Procesal Penal por la Universidad Panamericana, subraya que en su gestión se mantendrá una total independencia con los otros poderes, Ejecutivo y Legislativo.

 “Nosotros somos un poder totalmente independiente y, desde luego, que vamos a mantener una relación de coordinación con los otros dos poderes en beneficio de los justiciables, pero no de subordinación”.

“Es necesaria la coordinación con el Poder Ejecutivo para, por ejemplo, capacitar a servidores públicos en los protocolos, atención a víctimas, a grupos vulnerables, políticas de equidad de género, entre otras; y en el caso del Poder Legislativo para proponer algunas iniciativas de reformas a leyes y contar con los presupuestos necesarios para que el tribunal cumpla con el mandato que la ley le impone”.

Porque son necesarios recursos financieros, humanos y materiales para concretar los procesos orales en materia penal, civil, laboral, etcétera.

“Ya estamos trabajando en esto, tenemos poco tiempo para la implementación de los juicios orales, y aunque se necesitan instalaciones nuevas, reformas legales, ya estamos formando comités tanto con los magistrados, como con los consejeros y jueces, para su implementación, porque si bien es un reto fuerte hay que afrontarlo con eficiencia ya que lo debemos hacer y lograr”.

Ramírez Jiménez manifiesta que, para cambiar la percepción ciudadana sobre la corrupción e ineficiencia en la administración de justicia, es necesario hacer sentencias con lenguaje menos técnico para que los justiciables y su familia lo entiendan, así como fortalecer la transparencia para que la gente conozca el trabajo y las resoluciones del tribunal.

Respecto al caso de la fotógrafa italiana Elena Marini y el padre de su pequeña hija, que fue resguardada en el DIF estatal ante la disputa legal que mantienen sus progenitores por su guarda y custodia, en el que se acusa a la jueza de favorecer a una se las partes, asevera que el asunto es delicado, pero lo fundamental es que se privilegió el interés superior de la niñez como lo establece la ley.

“En este caso se veló por los derechos y bienestar de la niña, todo apegado a derecho, con responsabilidad, atendiendo los derechos humanos; incluso, aun en la disputa legal que mantienen el padre y la madre, ellos deberían entender que el interés superior es la niña”.

“Solamente quien pueda revisar el expediente podrá advertir por qué se dictó la resolución en este sentido, el tema es muy sensible y no debo abundar, pero todo estuvo estudiado y consideramos que quien tenga todo el expediente podrá validar la resolución. Además, los padres tienen a salvo sus derechos para hacerlos efectivos ante las instancias respectivas”. 

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