El arzobispo Pedro Vázquez Villalobos llamó a los oaxaqueños a iniciar un año nuevo con los propósitos de ser verdaderos hijos de Dios para verse como hermanos, construir una sociedad más justa, trabajar con honradez y respeto, así como atender a sus familias para que sean promotoras de la vida, el amor, los valores y la oración.
“Que sean un espacio para formar personas libres y responsables”, asentó.
En un mensaje por el Año Nuevo, el pastor religioso convocó a tener un momento para reflexionar, porque hay días distintos y muestran la finitud de la vida.
“Los años no pasan en vano, todo es aprendizaje, hagamos un buen examen de conciencia y seamos agradecidos con Dios por las oportunidades que nos ha dado, la vida es un gran regalo, ¿la hemos aprovechado bien?, ¿hemos hecho algo bueno por los demás o hemos dañado a quienes nos rodean?, él espera mucho de nosotros”, asentó.
De este modo, requirió a los oaxaqueños ser conscientes de su fragilidad e imperfección, al recordar a las personas quienes estuvieron y ya no están.
“Reflexionemos que también nosotros tenemos que despedirnos, el tiempo que pasa nos recuerda que vamos caminando al encuentro del Señor, pero también a la esperanza de que llega algo nuevo”, señaló.
Ante esto, Vázquez Villalobos pidió a Dios dar la sabiduría necesaria para buscar siempre los bienes eternos y lo que nunca muere.
“Que nuestras vidas sean una continua ofrenda agradable a Dios”, terminó.
“Que Nuestra Señora de La Soledad, interceda por nosotros en este año ¡Feliz Año Nuevo 2023!”, pidió Vázquez Villalobos.
