El titular del Poder Ejecutivo, Salomón Jara Cruz, informó que presentará una iniciativa de reforma al Código Penal para el Estado Libre y Soberano de Oaxaca ante el Congreso estatal, a fin de tipificar y sancionar con prisión de 3 a 9 años la violencia vicaria.
En conferencia de prensa, manifestó que con ello Oaxaca será el estado número 17 a nivel nacional en reconocer este tipo de violencia de género y será uno de los pocos que establezca una sanción privativa de la libertad.
“Con esta iniciativa queremos fortalecer el marco legal e institucional para seguir avanzado en la lucha contra la desigualdad y contra las violencias que de manera cotidiana sufren las mujeres”.
Jara Cruz recordó que en el último año lograron la reducción del 30 por ciento de muertes violentas de mujeres.
“La Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim) ha reconocido este esfuerzo y esperamos seguir reduciendo de manera significativa los distintos tipos de violencia”.
Entra en vigor la reforma la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y los códigos civil y penal federales para prevenir y sancionar la violencia vicaria, que aumenta la pena por ejercerla a través de interpósita persona.https://t.co/mrCKXjJKsH
— Noticias Oaxaca NVI (@nvinoticiasoax) January 20, 2024
Recordó que en la violencia vicaria pone en el centro a la mujer como víctima de la violencia, pero también atiende la violencia ejercida hacia las niñas y los niños a quienes se les manipula, retiene e, incluso, dañan para causar dolor a la madre.
“Agradeceré la atención y prioridad que le puedan dar los diputados y las diputadas a un tema como este que es de la mayor trascendencia en nuestro estado”.
Cabe recordar que Amnistía Internacional define a la violencia vicaria como: una forma de violencia de género por la cual los hijos e hijas de las mujeres víctimas de violencia de género son instrumentalizados como objeto para maltratar y ocasionar dolor a sus madres.
Además, precisa que entre las formas más comunes de manifestarse son las amenazas de llevarse a los niños y niñas, quitarle la custodia o incluso matarlos; aprovechar la presencia de los hijos e hijas para insultar a la madre, hablar mal de ella, humillarla y amenazarla; interrumpir los tratamientos médicos o farmacológicos de los niños y niñas cuando deberían de estar en tratamiento; y utilizar los momentos del régimen de visitas para inventarse información dolorosa acerca de las hijas e hijos o la ausencia de información durante esos días.
