El arzobispo de Antequera-Oaxaca, Pedro Vásquez Villalobos pidió a los creyentes consolar a María por la muerte de su hijo Jesucristo, pero también a sus padres y madres que están sufriendo por su abandono.
“Hemos venido ante María, porque su hijo ha muerto y ese hijo es nada menos que nuestro Salvador. Cuánto dolor hay en María”, asentó.
En el pésame ofrecido a Nuestra Señora de La Soledad, el mitrado afirmó que María ha de decir a los creyentes en el momento presente, vayan a consolar a sus padres, ve y consuélame en tu padre y en tu madre, ahí consuélame, ahí enjuga las lágrimas y ahí aliviana el sufrimiento.
“Ahí haz fuerte a esos seres que te dieron la vida, ¿por qué los abandonaste?, ¿por qué te has olvidado de ellos?, ¿por qué te avergüenzas de los que te dieron la vida? Ahí es donde quiero que me consueles el día de hoy. Ve y consuélame allá, porque ahí sufro, porque un hijo sufre por tu ingratitud”, anotó.
Expuso que los católicos deben consolar a sus padres, aceptándolos así como son, como padre y como madre.
“Acéptalos, no lo elegimos nosotros, ninguno eligió a su padre o a su madre, la elección la hizo Dios, porque él nos llamó a la vida y nos llamó a la vida valiéndose de ese hombre y esa mujer, que no son el hombre perfecto ni la mujer perfecta”, agregó.
Subrayó que los padres están llenos de virtudes, pero también de defectos y están necesitados tener la experiencia de paternidad y maternidad.
“Y a los hijos, les toca que ellos se sientan padre y se sientan madre, no les nieguen el amor de hijo. No eres tú el que tiene que condenar a papá o a mamá”, aseveró.
De esta manera, llamó a los católicos a pedir gracia y bendición para sus padres e ir a sus casas consolarlos.
“Pienso que María nos dice ve a tu casa ya que ahí hay unas personas que necesitan consuelo, que necesitan amor, que necesitan paciencia, que necesitan misericordia, que necesitan compasión, que necesitan espíritu de servicio, que necesitan tantas cosas”, remarcó.
Aunque, Vásquez Villalobos también convocó a los creyentes a consolar a sus hermanos quienes también necesitan sentirse amados.
“Cuántas personas viven desilusionados, cuántos jóvenes y adolescentes necesitan consuelo y amor. María hoy nos dice ve a consolar, me has venido a consolar, siento necesidad que me consueles en tal persona, ahí consuélame, ahí lléname de ilusión y de esperanza, ahí fortaléceme, ahí enjuga mis lágrimas, ahí cambia el rostro triste por un rostro alegre. No seamos egoístas, no solo pensemos en nosotros, es necesario que pensemos en los demás, es lo que quiere Dios, es lo que quiere la madre de Dios”, terminó.
“Cuántas personas viven desilusionados, cuántos jóvenes y adolescentes necesitan consuelo y amor. María hoy nos dice ve a consolar, me has venido a consolar, siento necesidad que me consueles en tal persona, ahí consuélame".
Pedro Vásquez Villalobos, arzobispo de Oaxaca
