TEHUANTEPEC, Oaxaca.- Entre lágrimas, gritos de dolor y reclamos de justicia para el feminicidio de Akemy, familiares y amigos, depositaron los restos mortales de esta mujer en su última morada.
Los deudos se abrieron paso entre la multitud que los acompañó en su camino al panteón de San Luis Rey. En brazos cargaron una cruz de madera y la fotografía de la joven.
La mayoría de quienes acompañaron a los familiares de la víctima, acudieron vestidos de negro en señal de luto y dolor. Iniciaron el cortejo fúnebre en la iglesia de Santa Teresa de Jesús, de donde fue originaria Akemy.
Las consignas escritas en pancartas que portaron los dolientes, fueron reclamos de justicia. A gritos, estas frases fueron repetidas una y otra vez en el trayecto, debido a los constantes feminicidios ocurrido en el país.
La violencia acabó con su vidaJayr Bustamante, hermano de Akemy, demandó justicia para todas las víctimas de feminicidio en México, y que las autoridades asuman su responsabilidad para que no quede impune ninguna de las investigaciones que están abiertas.
El joven recordó a su hermana como una mujer alegre que solía contagiar su estado de ánimo a todos, y daba palabras de aliento a quien lo necesitaba.
Era una buena amiga. Para ella no existía la tristeza. Su sonrisa estaba por encima de todo. Es como si se viviera un sueño, ojalá pronto se termine tanto dolor, no solo en nosotros, si en todas las personas que perdieron a un ser querido, sostuvo.
Ya no es tiempo sólo de pedir “ni una muerta más”. Debemos estar unidos para no ocurra más un hecho sangriento como el que involucró a su hermana, dijo.
Sostuvo que Akemy fue engañada por su pareja que abusó de su cariño y de su deseo de aferrarse a una familia, la manipuló para hacerle daño y le quitó la vida al buscar terminar esa relación.
El asesinato de la joven ocurrió hace días en la colonia Consejo Agrarista de la Ciudad de México, tras una discusión que derivó en pelea; se presume que la mujer manifestó su intención de terminar la relación a su pareja sentimental.
