La entrega de los títulos de concesión comunitarios a 16 poblaciones zapotecas de los Valles Centrales, pertenecientes a la Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y la Defensa del Agua (Copuda), muestra la disposición e interés del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador por los pueblos originarios, porque sienta una nueva base normativa para que sean ellos quienes administren su derecho legítimo al agua, aseguró el director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes.
“En el pensamiento de la tecnocracia neoliberal era imposible imaginar el título de derecho colectivo del agua, pero con la llegada del Presidente las cosas han cambiado”, afirmó.
El funcionario sostuvo que la entrega de los títulos de concesión comunitaria demuestra la viabilidad de la administración y protección del agua por los pueblos y comunidades indígenas, en coordinación con las instancias competentes, como es la Comisión Nacional del Agua
“Hemos olvidado lecciones tan sencillas como el hecho de que sin agua y sin tierra no hay vida en este planeta, y esa es la filosofía que tenemos que recuperar ahora”, añadió.
Destacó que el agua es un bien común y por eso, debe estar bajo el cuidado de los pueblos y comunidades indígenas, aunque también es una gran responsabilidad.
“Por eso, en el decreto emitido por el presidente López Obrador se establecen los reglamentos comunitarios, porque necesitamos organizarnos, ahí es donde vamos a tener que trabajar mucho para fortalecer la organización comunitaria y a través de ella, podamos construir estas normas para que logremos el anhelo de garantizar el agua a las futuras generaciones”, agregó.
Además, subrayó que la lucha iniciada hace más de una década por la Copuda ha servido de ejemplo para iniciar el mismo proceso en el pueblo yaqui en sus demandas de tierra y agua.
“Ese es el cambio tan importante que estamos dando en este país”, anotó.
Regino Montes también reconoció la lucha de la activista social y fundadora del Centro de Derechos Indígenas Flor y Canto, Carmen Santiago Alonso, quien ofreció acompañamiento a la lucha de la Copuda.
“Quienes conocen esta lucha saben que no es una tarea fácil, es una lucha con múltiples obstáculos y resistencias, pero Carmen sabía que los pueblos indígenas teníamos un aliado en la presidencia. Y este acto es la prueba, las palabras sobran, pero la fuerza de los hechos es irrefutable”, terminó.
