En Oaxaca la interrupción del embarazo es legal desde septiembre de 2019, pero los que se realizan de manera insegura o clandestina rebasan a los que se practican como un servicio gratuito de salud pública.
Los Servicios de Salud de Oaxaca reporta mil 172 interrupciones legales realizadas entre el 25 de septiembre de 2019 y el 12 de septiembre de este 2023, contra los 2 mil 300 a 9 mil 200 abortos que se practican de manera insegura.
Para Guillermina Juárez Leyva, representante legal de la organización Mano Vuelta, que la cifra negra de interrupciones de embarazos sigan ganando camino a la oficial “tiene que ver con la desinformación en torno al tema, nueve de cada diez mujeres desconocen que el aborto ya es legal”.
Además, hace apenas unos días el gobierno de Oaxaca publicó los lineamientos para la atención de aborto, la cual se pidió contemplar la perspectiva intercultural.
Sin una campaña que garantice a las mujeres el conocimiento de este derecho, la activista Guillermina Juárez se pregunta “cómo va a bajar esta información a las jurisdicciones sanitarias y qué tanto se traducirá la publicación de los lineamientos en el acceso a un aborto seguro”.
“Aunque el aborto ya esté en la Ley, no se traduce en acceso”, insistió, ya que a pesar de que Oaxaca se conforma por 570 municipios, sólo existen 11 unidades médicas de los Servicios de Salud de Oaxaca que brindan atención para el acceso a una interrupción del embarazo de manera segura y gratuita.
Esta falta de interés en garantizar un derecho de las mujeres se agudiza en la dependencia que las autoridades estatales tienen de las fundaciones internacionales para comprar medicamentos que permitan interrumpir embarazos antes de las 12 semanas de gestación.
“Tan sólo en 2022 y este 2023 se compraron 17 cajas de misoprostol por año con 28 tabletas cada una”, así como 250 de mifepristona, los cuales pueden usarse combinados, dependiendo de las semanas de embarazo.
“Son medicamentos insuficientes”, insistió la representante de una de las organizaciones sociales oaxaqueñas que como parte del acompañamiento que brindan a niñeces y juventudes busca incidir en la justicia reproductiva y el derecho a decidir.
