Luis Ignacio Velásquez
Durante el 2021 el saldo de la deuda pública de la entidad ascendió a 15 mil millones de pesos que es “muy alta” para un estado como Oaxaca, aseveró el titular de la Auditoría de la Federación (ASF), David Colmenares Páramo, en el conversatorio La deuda de los estados, organizado por el Colegio de Economistas de Oaxaca que presidente Félix Hugo Clímaco.
Subrayó que las reestructuras de las deudas estatales, -como las que se realizaron en el 2021 por el gobierno estatal-, son un gran negocio para quienes las realizan, porque nada más amplía los plazos de pago. “Al final tenemos una carga, que como decíamos en una época, de la deuda tradicional, pasa a una deuda eterna que no van a pagar nuestros hijos, sino, a lo mejor, nuestros nietos”.
“Lo que ganan los gobiernos que hacen las reestructuraciones es que durante su ciclo el periodo de servicio, que es la amortización más los intereses, agarra una curva hacia abajo, pero cuando termina el siguiente gobierno tiene que hacer otra reestructura porque el servicio se le va a disparar, ahí está el caso de Veracruz en el periodo de Miguel Ángel Yunes Linares”.
El ex secretario de finanzas de Oaxaca, recomendó en este caso aprovechar los mecanismos de la coordinación fiscal a nivel de los estados para establecer sus propios mecanismos de revaluación o de negociación de la deuda y no contratar grandes despachos que se llevan grandes cantidades de dinero, cuando sería mucho más fácil hacer una reestructura de esa naturaleza.
“Nosotros, Indetec y Hacienda, le ayudamos a la reestructura de su deuda al estado de Guerrero, en el gobierno de Zeferino Torreblanca, quien solo tuvo que contratar a un abogado y no les costó absolutamente nada, porque la SHCP e Indetec asumieron los costos de esta reestructura, entonces hay que repotenciar la coordinación fiscal”.
Comentó que otro tema importante es la recaudación que hacen las entidades federativas de sus ingresos estatales, “por ejemplo la Ciudad de México recauda casi la mitad de sus ingresos totales contra un promedio del 5 por ciento de la mayoría de los estados, por lo que tiene que afectar las participaciones federales en la contratación de créditos; hay que recaudar lo que la Constitución les permite”.
Destacó que la deuda municipal oaxaqueña es mínima, toda vez que los 417 municipios que se rigen pos sistemas normativos internos no tienen acceso a créditos. “No hay un problema de deuda municipal”.
Recordó que en 1990 Oaxaca no tenía deuda pública e incluso se liquidó la deuda de municipios, en el gobierno de Diodoro Carrasco se incrementó en 150 millones de pesos, pero después del gobierno de José Murat la contratación de deuda fue exponencial.
