La actriz oaxaqueña Teresa Ruiz, actualmente una de las protagonistas de la serie “Narcos”, producida por Netflix, fue nombrada embajadora de la Gran Fiesta del Mezcal de Matatlán, municipio cuna de esta bebida.
“Me nombraron embajadora y eso me da muchísimo orgullo. Estoy agradecida de que me hayan confiado la palabra para poderla comunicar por los canales en los que tengo oportunidad de difundir”, expresó.
La joven actriz, quien compartió escenario con Jenifer López y Antonio Banderas en Bordertown, fue recibida entre porras y el cariño de la localidad que la vio nacer.
Como una distinción de honor por su destacable carrera dentro del mundo del cine, le fue entregado el bastón de mando.
“Cuando uno logra alcanzar sus sueños, se dicen muchas cosas alrededor de eso. Yo lo que creo es que la autenticidad es lo que te lleva a tener los grandes éxitos de esta vida. Eso es lo que yo veo en mi pueblo, de estos maestros mezcaleros, de mi gente, que ellos son auténticos porque trabajan y aman lo que hacen”, apuntó.
La Gran Fiesta del Mezcal de Matatlán fue inaugurada el pasado domingo. A lo largo de esta semana quienes visiten el municipio podrán conocer las marcas de cien casas mezcaleras, ingresar a los palenques y disfrutar de la calidez de la población.
Amor por la actuación
El amor de Teresa Ruiz por la actuación nació alentado por la música y la poesía que desempeñaban sus abuelos.
“Yo vengo de familia y de ancestros que tienen que ver con vivir en el pueblo y vivir las canciones del pueblo. Yo ya traía esa inquietud en la sangre. Cuando tomé una clase de actuación y desde la primera vez que me paré en un escenario sentí un reconocimiento muy grande. Me di cuenta que ese iba a ser mi camino y nunca he deseado hacer nada más”.
Identificada íntimamente con su contexto personal, a lo largo de su carrera Teresa Ruiz ha interpretado mujeres migrantes y mujeres que luchan.
Ha aceptado muchos papeles y rechazado otros más, basada siempre en interpretar sólo aquellos que la conectan con la fuerza y que logren aportar.
“He hecho muchos personajes de mujeres que luchan y creo que es porque es algo que traigo conmigo. Yo migré como muchas personas de mi pueblo. Yo conozco esas historias y siempre que escojo un papel es porque pienso que tengo algo que decir y algo que aportar. Muchas veces he rechazado personajes porque siento que no es esa la historia a la que yo puedo darle más verdad”, expuso.
La oaxaqueña ha ganado diferentes premios como Mejor Actriz a nivel internacional, asimismo es integrante vitalicia del Actors Studio, organización compuesta por una membresía de actores profesionales dirigidos por Al Pacino, cuya sede se encuentra en Nueva York y Los Ángeles.
La artista estudió el método bajo la instrucción de Martin Landau, Greta Seacat y Sandra Seacat.
Entre sus trabajos más reconocidos se encuentran las series Narcos: México, Father Stu, The Marksman, Aquí en la Tierra, Luis Miguel: la serie, Viaje redondo, entre otras.
“He tenido muchos personajes muy bonitos a través de los años y creo que uno escoge los personajes por lo que representan para nosotros. Siempre es un volado al aire y ver cuáles son los que van a conectar con la gente, los que van a poder traspasar fronteras. En México hemos hecho proyectos que han tenido alcances muy grandes por las historias que contamos que son tan sinceras y necesarias para nosotros”, explicó.
Informar a través de la narrativa visual
Para Teresa Ruiz, actuar no es sólo pararse en el escenario y contar cualquier historia. Su trabajo -afirma- tiene que ir más allá: informar a través de la narrativa visual.
“Uno de los trabajos del cine que hacemos en nuestro país es informar a través de la narrativa visual y de las historias personales. Las historias se quedan mucho más en la cabeza y en el corazón cuando tienen nombre. Muchas de las películas que yo hago hacen esto, le dan una cara y una voz a algo que solamente puede ser una palabra si la lees”, indica la protagonista de Ruido, película que habla sobre la desaparición de personas en México.
Siendo originaria de Oaxaca y la primera en su familia en dedicarse a la actuación, el camino dentro del mundo del cine no le ha sido nada fácil, pero al mismo tiempo -afirma- es el arma que nadie le puede quitar: la esencia de su pueblo y su herencia cultural.
“La actuación es un camino difícil sobre todo cuando eres pionera en lo que haces, yo soy pionera de esto en mi familia y en ese sentido ha sido difícil, al mismo tiempo tengo una bendición mas grande que la dificultad, el ser de Oaxaca. Ser de mi pueblo, venir de donde vengo, hace el camino más difícil, pero al mismo tiempo es el arma que nadie te puede quitar, es lo especial de quién eres, es lo que tengo que aportar. A donde me paro llevo la esencia de lo que soy, la esencia de mi pueblo y de mi gente, eso es indescriptible e innegable, lo bello de mi herencia es lo que nadie más tiene, es lo que yo aporto a la cinematografía de mi país y del mundo”.
