Nadia Altamirano Díaz
Logre o no su sueño de desarrollar un fármaco contra el cáncer, el investigador oaxaqueño Audifas Salvador Matus Meza ha dado una enseñanza de que es posible hacer ciencia, en un país propio y ajeno, si se consigue el financiamiento y se está en un espacio donde existe la infraestructura suficiente.
A partir del 1 de junio el equipo de investigación del Centro Médico de la Universidad de Nebraska, Estados Unidos, en el que participa el doctor en ciencias, recibirá por uno o dos años una beca para trabajar en el diseño de agentes radioterapéuticos para el tratamiento del cáncer colorrectal.
Al equipo en el que participa Audifas Matus le puede llevar de uno a dos años tener una idea más completa de los compuestos que después deberán demostrar que funcionan en animales, un paso antes de ensayar en humanos.
La estimación general, de acuerdo con el desarrollo de otros fármacos, es que las 3 etapas de todo el proceso puedan durar de 7 a 8 años e implicar una inversión de 8 a 10 millones de dólares, a fin de focalizar la liberación de radiación en donde se encuentra el tumor y no de manera general como se hace actualmente.
“Me ha llamado siempre la atención buscar una solución a una enfermedad, pero la investigación es muy amplia, así que me enfoqué más en el cáncer porque es el que más ataca a la población y se está incrementando”, relata en entrevista telefónica.
En 2010 egresó con mención honorifica de la UABJO como químico biólogo y en 2013, Audifas Matus terminó su maestría en Ciencias en la Universidad Nacional Autónoma de México, donde continuó con el doctorado.
En febrero de 2020 se unió al grupo de investigación del Dr. Martín Conda-Sheridan del Centro Médico de la Universidad de Nebraska, en EU, para realizar su primero de dos postdoctorados.
Al iniciar su segundo postdoctorado en la Universidad de Nebaska, Audifas Matus se unió al grupo de investigación del doctor Jered C Garrison, con quien ha logrado financiamiento del Centro Nacional del Cáncer, en EU, para identificar un fármaco radio terapéutico que se pueda experimentar en humanos.
“La historia de esto comenzó porque en diciembre de 2021 escribí, junto con mi asesor, el proyecto en el que se plantea la problemática del cáncer de colón, lo que ya existe y lo que se puede resolver mediante el desarrollo de un radioterapéutico”, culminó en entrevista.
