Cuando Siria Lorena Cruz Martínez conoció a su esposo Fortunato Cruz Simón, éste le enseñó a moldear el barro para que pudiera vender sus piezas y tener un ingreso económico; no obstante, desde su llegada a este municipio, ha recibido diferentes tipos de violencia, incluso la física.
En redes sociales, cada que se publica algún reconocimiento, nota periodística o actividad de la artesana, le llueven críticas, señalamientos y comentarios violentos, por lo que ella decidió interponer una denuncia.
Relata que desde que comenzó a vivir en este municipio, es decir, desde 2020, ha sufrido acoso, discriminación y violencia, esto bajo el pretextos de que no es originaria de la población.
La artesana comparte que después de que esta casa publicó su historia de vida y en la que se relataba su éxito haciendo estas piezas, esto el pasado 11 de septiembre, los señalamientos y hostigamientos incrementaron.
En dicha publicación, las personas señalaban que ella ha “denigrado” a la comunidad, por lo que incluso se está pidiendo su expulsión de San Bartolo Coyotepec, ya que mencionan que ella no es originaria de este lugar.
Siria Lorena nació y creció en San Lorenzo Cacaotepec, pero abandonó su lugar de origen debido a que sufría violencia en ese lugar, por lo que su esposo decidió llevarla a San Bartolo, donde también se ha enfrentado a la misma situación.
Comparte que su esposo es la tercera generación de artesanos de barro negro; no obstante, él sólo hacía sólo algunas piezas, pero le enseñó a ella este arte que les ha dado grandes sorpresas y beneficios desde 2020.
El barro, su segunda oportunidad
Peko, como es conocida de cariño, relata que para ella, el barro es su segunda oportunidad de vida después de lo sufrido en San Lorenzo Cacaotepec.
“Yo siempre he dicho que el barro es mi héroe, mi segunda oportunidad de vida. No sé en qué momento ofendo a su pueblo y el trabajo tan digno que es el barro”, declara.
Esto debido a que las personas de San Bartolo aseguran que ella denigra el trabajo o no le da el valor a la artesanía.
Asegura que recientemente ha asistido a algunas expos artesanales donde pide que no le pongan que sus piezas son de San Bartolo Coyotepec, sino de los Valles Centrales.
Agreden a esposo, empleados y clientes
La artesana relata que ha evitado publicar sus trabajos y participaciones en ferias debido al hostigamiento que recibe, ya sea en comentarios o incluso en las publicaciones en las que la etiquetan.
Abunda que en una ocasión, una clienta compartió unas piezas que le compró y la recomendó, por lo que comenzó a tener reacciones de enojo y comentarios groseros, intimidándola.
Asimismo, también están hostigando a su esposo y empleados en la calle a quienes le gritan, ofende e incluso, en el caso de sus empleadas, han tenido que acudir a las autoridades municipales por el comportamiento.
Aunque recientemente hubo una asamblea del ayuntamiento para exponer su tema, está a la espera de qué ocurrirá con su situación, mientras tanto ya se acercó a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) para presentar su denuncia por esta violencia.
También informa que acudirá a la Defensoría de los Derechos Humanos de los Pueblos de Oaxaca (DDHPO) para respaldar su declaración y poder estar un poco tranquila, ya que señala que teme salir y ser agredida.
