El soborno o la omisión para una obra en la capital del estado se han convertido en las vías para que el ramo de la construcción pueda iniciar su trabajo.
Así coincidieron la Sociedad Mexicana de Ingenieros (SMI) y el Colegio Libre e Independiente de Arquitectos de Oaxaca; representantes de esos gremios apuntaron que, debido a los altos costos que implica una licencia y los trámites burocráticos, el 80 por ciento de las construcciones en Oaxaca se realizan sin autorización.
La obtención de un permiso de construcción es uno de los cuatro indicadores por los que el estudio Doing Business del Banco Mundial calificó a Oaxaca entre las ciudades con ineficiencia y menor calidad de la regulación para facilitar la apertura de negocios en México y que entorpece la productividad.
Ineficiencia
Debido a la pérdida de tiempo que generan los trámites para un permiso de construcción se ha hecho más factible sobornar a los inspectores de obra para iniciar la edificación, pues en la mayoría de los casos las licencias se liberan una vez terminado el trabajo, señaló el presidente de la Sociedad Mexicana de Ingenieros, José Marcos Matus.
En cuestión de requisitos, el representante de los ingenieros en Oaxaca dijo es una larga lista de documentos la que extiende el trámite para una obra que, en ocasiones, no superará los cuatro meses de trabajo.
El presidente de la Colegio Libre e Independiente de Oaxaca, Gerardo Corres, precisó que 80 por ciento de los constructores optan por comenzar la obra antes que la licencia se otorgue, pues el proceso es tardado y costoso.
Por una licencia para una casa habitación el costo puede variar entre los siete y los 10 mil pesos, lo cual es irracional en comparación al tipo de procedimiento burocrático.
En la capital, dijo, la carta urbana no está digitalizada, lo que al mismo tiempo también se coloca en desventaja sobre otras ciudades.
El arquitecto mencionó que la calidad del archivo del desarrollo urbano es deficiente; para localizar la ubicación del área a intervenir la tarea aún se realiza en mapas de muy baja calidad y ni siquiera existe personal que corrobore el terreno.
“Se ha convertido más importante recaudar recursos a través de las licencias, que el propio ordenamiento urbano”, indicó el presidente de la asociación civil.
Pequeño negocio, grandes trámites
Otro de los factores que colocan a Oaxaca entre los estados menos eficientes para realizar negocios es el procedimiento para abrir una empresa.
De acuerdo a una consulta con personal del ayuntamiento, el permiso para abrir un restaurante sin venta de bebidas alcohólicas en el Centro Histórico puede dilatar hasta mes y medio.
El proceso que más tiempo tarda es el uso de suelo comercial, pues el trámite puede ocupar hasta 30 días.
Por el uso de suelo para un local promedio de 25 metros cuadrados, el costo sería de dos mil 115 pesos en promedio; ésto luego de cumplir con más de una docena de trámites.
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80% de construcción privada inicia sin licencia
3 mil a 10 mil pesos costo de licencia
6 meses puede emplear en liberar un permiso de uso de suelo
