Agencia Reforma
Especialistas enfatizaron en que la disminución de contagios, muertes y hospitalizaciones son señales positivas, pero no significan que la emergencia por coronavirus haya terminado.
La clave para mantenerla controlada y a la baja, destacan, es el reforzamiento de medidas de prevención de contagios.
Principalmente el uso correcto y permanente de cubrebocas en espacios cerrados con personas con las que no se vive y en sitios públicos, evitar aglomeraciones, vacunarse y priorizar la ventilación o espacios abiertos.
Alejandro Macías, infectólogo, señaló que no se ha erradicado la enfermedad. Por esto, destacó, se deben maximizar los cuidados, con medidas que sí frenan el virus.
"Ya sabemos ahora que está enfermedad se transmite por el aire, de manera que funciona mucho mejor el usar cubrebocas y el ventilar los espacios cerrados, así como evitar tumultos de personas que arcos sanitarios que no funcionan, que tapetes de cloro que no funcionan o, inclusive, la promoción excesiva de que el lavado de manos va a terminar con esto, cuando no es sólo eso.
"También es conveniente recordar que se han politizado algunas acciones, debemos dejar claro que el cubrebocas va a seguir funcionando, que debemos despolitizar su uso, que todavía sería conveniente que lo estuviéramos promoviendo y que nos apegáramos mejor a las evidencias cuando se tomen decisiones de Salud Pública", enfatizó.
Gustavo Oláiz, coordinador del Centro de Investigación en Políticas, Población y Salud de la UNAM, coincide con Macías sobre las medidas que al principio de la pandemia se creían lógicas o correctas, pero que la evidencia descartó como útiles contra el virus.
Además, añadió que acciones como la toma de temperatura son inútiles, si se toma en cuenta que se necesitaría asegurar que la persona no toma ningún medicamento que baje la fiebre o que es asintomático.
"El cubrebocas es la medida más importante, uno tipo N95, quirúrgico, más uno de tela, más de dos capas al menos es necesario y que esté bien puesto, cubriendo nariz y sin huecos a los lados, si después de dos años no hemos aprendido, estamos mal", explicó.
