CIUDAD DE MÉXICO.- Los asesinatos y desapariciones de periodistas a manos del crimen organizado en colusión con autoridades locales, el aparente espionaje del Gobierno federal y el control que éste ejerce a través de la publicidad oficial mantienen aterrada a la prensa y merman el trabajo independiente, advirtieron los relatores sobre libertad de expresión de Naciones Unidas (ONU) y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En entrevista con Grupo REFORMA, David Kaye, de la ONU, señaló que la violencia que se ejerce contra los comunicadores en el País sólo es peor en lugares como Siria.
"México es un Estado democrático, miembro de la OCDE, en muchos sentidos es un país desarrollado, si se le quiere compara con otros países un lugar donde la violencia es peor sería Siria", comentó.
Esta violencia, secundó Edison Lanza, de la CIDH, ha empeorado en los dos últimos años y es comparable a la que sufrió Colombia en los 90, en medio de su conflicto armado interno.
Desde el 27 de noviembre, cuando iniciaron una visita oficial conjunta a México, los relatores estuvieron en Tamaulipas, Sinaloa, Veracruz y Guerrero, y en la Ciudad de México se reunieron con periodistas y organizaciones civiles de 21 estados.
En los encuentros conocieron de hechos que no se denuncian por desconfianza a las autoridades locales y federales.
"La situación es peor de la que se ha documentado (...) algunos de ellos (los periodistas) están aterrorizados por lo que vivieron, por ver la muerte y desaparición de sus compañeros, por las prácticas que tienen los cárteles para tratar de infiltrar a la prensa, cooptarla, tratar de utilizarla para sus fines, y eso ha generado una autocensura enorme en muchas de las regiones que visitamos", describió Lanza.
Aunque los temas más riesgosos de investigar son la corrupción, el crimen organizado y el narcotráfico, los relatores notaron que el peligro está cada vez más en coberturas comunes, mientras que la infiltración de crimen en gobiernos estatales hace difícil distinguir quién es el autor intelectual de los ataques.
Piden investigar
La investigación del espionaje gubernamental mediante el programa Pegasus debe hacerse de manera independiente, ya sea con organizaciones civiles y académicas de México o mediante actores internacionales, planteó Kaye.
Indicó que la Procuraduría General de la República (PGR) era un comprador de Pegasus y no es un actor independiente.
