La imagen personal es una fuerte herramienta en el ámbito social, sin embargo, es un término confuso que muchos pueden confundir con la estética.
Se trata de la manera en que nos presentamos, incluyendo nuestros aseo personal, el cuidado de nuestro cuerpo, nuestro comportamiento y hasta de cómo nos expresamos verbalmente.
Mejorar la imagen personal también es mirarse al espejo con cariño, destacar nuestras virtudes y limar nuestros defectos.
Carmelina Méndez Jiménez, diseñadora de imagen y publirrelacionista, explica a fondo el significado real del diseño de imagen.
La gente normalmente piensa que el diseño de imagen es solamente cortarse el cabello o hacerse un cambio de look, sin embargo este trabajo tiene muchas vertientes.
Toda imagen pública ya sea personal o institucional, está subordinada en diferentes imágenes: física, profesional, verbal, visual, audiovisual y ambiental (escenarios donde se desvuelvan las personas).
Es por ello, que un especialista en imagen tiene que dominar temas relacionados con todas esas áreas y, además, saber de mercadotecnia, ya que cuando esas imágenes conformen la gran imagen pública, ésta deberá ser posicionada en un mercado político, empresarial, institucional o personal según sea el caso y/o las necesidades del cliente, explicó la experta.
Para llevar a cabo el cambio de imagen, es necesario realizar diferentes análisis previos: análisis de personalidad, análisis del público con el que el cliente convive, trabaja o las actividades que realiza.
Habiendo distinguido y finalizado cada uno de los análisis, la experta señaló que es necesario unir todos los elementos que los integran. Sin embargo, todos los estímulos que se generen dentro de este gran cúmulo de información deben ser coherentes a la hora de comunicar el mensaje que el cliente desee proyectar.
El tiempo aproximado para hacer un cambio de imagen es de 1 a 2 meses.
Vestirse bien no es sinónimo de vestirse con ropa cara o a la moda, más bien significa vestirse con ropa que favorezca tanto el cuerpo que se tiene, lo que desea proyectar y/o lo que el cliente quiera.
En el diseño de imagen entra mucho la parte psicológica, es ahí donde el especialista debe tener las herramientas necesarias para poder explicarle al cliente lo que necesita para lucir bien, debido a que existen muchas personas inseguras o que no se atreven a cambiar su imagen.
El cuerpo humano no es perfecto y el diseñador de imagen debe tener cierto poder de convencimiento: "esto te lo estamos proponiendo porque va de acuerdo a tu personalidad", son colores que te favorecen y te ayudarán a potencialilzar tus atributos", advierte la especialista.
Los expertos en diseño de imagen además de conocer distintos temas, se apoyan de diferentes especialistas: estilistas, psicólogos, nutriólogos, doctores, etc., dependiendo de las necesidades del cliente.
"Siempre me gustó ver revistas desde pequeña, ver qué ropa usaban las modelos, sin embargo con el tiempo empecé a notar que esa ropa no la usa la gente común y más adelante en la búsqueda de mi vocación y carrera profesional, encontré la licenciatura que estudié, la cual me convenció debido a la variedad de materias que tenía, cada una relacionadas tanto en lo psicológico y como en lo físico", señaló.
"Me encanta ver el cambio total de una persona cuando se le hace un diseño de imagen, ya que al final puedes ver la alegría que refleja, cuando le enseñas como pueden vestirse de una forma adecuada para ellos y sentirse bien consigo mismos", mencionó Carmelina Méndez Jiménez.
Para finalizar, la experta recomendó probar cosas nuevas sin importar lo que la gente diga y luchar por nuestros sueños.
Estudian apariencia
1. Análisis antropométrico: estudia el tipo cuerpo humano y la silueta, conociendo así las proporciones corporales, determinando las simetrías y asimetrías en las medidas del cuerpo e identificar aquellos elementos característicos de la anatomía de cada individuo; e incluso aquellos elementos que permitirán a cada persona potenciar sus cualidades y características positivas.
2. Análisis de morfología: consiste en determinar la forma del rostro y cara.
3. Análisis de colorimetría: identificar que tonalidades favorecen a la persona. Usar colores acorde a tu colorimetría hará que luzcas más sano y con mayor energía.
4. Análisis de guardarropa: Que tipo de ropa tienes, que ropa te sirve de acuerdo a tu silueta y color.