Culiacán.- Por siete años consecutivos Alba Ontiveros Félix buscó embarazarse por segunda vez, situación que se le dificultaba.
Por lo que con el apoyo de su esposo, Fernando Ibarra, y la asesoría de diferentes médicos, lograron que pudiera embarazarse para dar a luz a un niño pero esto último no se cumplió debido a una mala atención en el hospital regional del Issste Manuel Cárdenas De la Vega, situación que sus familiares denuncian y piden que se haga conciencia para evitar que estos casos vuelvan a ocurrir.
Falta de atención.
Alba ingresó al nosocomio el pasado sábado 6 de febrero por una infección vaginal, la cual no le fue tratada de manera inmediata; sin embargo, los médicos señalaron que el bebé no se encontraba en riesgo y le habían programado hacerle un ultrasonido hasta el lunes.
Su esposo se percató que sólo la habían canalizado, mas no aplicado algún medicamento que pudiera controlar la infección.
Buscó a las enfermeras del área de tococirugía para que le dieran un motivo por el cual su esposa no había recibido medicamentos.
“Me dijeron que estos tenían horarios para aplicarse y que sería después de las 12 del día. Mi esposa pasó tres horas sin tomar nada que le calmara su malestar”, indicó Fernando Ibarra, quien desconsolado relató que la muerte de su esposa fue inesperada, ya que ella había sido internada en ocasiones anteriores por el mismo motivo y era atendida sin problema alguno.
A pesar de que se le suministraron antibióticos, Fernando recibió la llamada de su esposa a las 00:00 horas para decirle que le habían anunciado que el bebé había muerto y que la tenían en observación hasta que comenzara a dilatar y pudiera dar a luz.
Dieron las 03:00 cuando un médico de guardia pidió al esposo de Alba que comprara un medicamento para bajar la temperatura corporal, ya que en ese momento no lo tenía en el hospital.
Angustia.
Varias horas de desesperación fueron las que pasó Fernando en espera de escuchar que su esposa habría dado a luz sin problema, pero la situación empeoraba, ya que la temperatura no dismuía y cada vez Alba se encontraba más débil.
A las 9:30 horas la víctima ingresó al área de terapia intensiva, argumentándole uno de los médicos que hicieron lo posible porque tuviera una mejoría.
La familia denuncia que no fueron capaces de hacerle una cesárea a tiempo, y esperaron a que esto se complicara.
Para evitar una tragedia mayor durante la cirugía, se les pidió a los familiares que buscaran donadores de sangre, ya que el Issste no contaba con sangre, pero esto quedó en vano ya que a las 12:00 les informaron que Alba había fallecido, señalando su esposo que había encontrado el cuerpo de su esposa desecho, con un color de piel oscuro y ensangrentada por diferentes partes de su cuerpo.
Justicia.
La familia de Alba decidió hacer público su caso, ya que no quieren que más personas sean víctimas del servicio que prestan algunas instituciones públicas, así como exigir a las autoridades se dé con las personas responsables.
Como parte del consuelo, sus familiares la recordaran como una mujer alegre, saludable y comprometida con el trabajo que desempeñaba en la Secretaría de Educación Pública y Cultura, en el área de Becasin, además de caracterizarse por ayudar a quienes más lo necesitaban.
