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Deuda con los pueblos negros de Oaxaca, "cliché de ciertas danzas” sólo buscan el turismo

Foto(s): Cortesía
Nadia Altamirano Díaz

Con sus ausencias y novedades, el programa de las cuatro presentaciones de la Guelaguetza en su edición 2018 se mantiene “fiel” a su cometido de ser “un provocador” de la derrama económica para la entidad.


Así lo interpreta el director de Santa Cultura, José Luis Pérez Cruz, quien opinó que si se quisiera tener una plataforma que difunda la identidad cultural debería crearse otro tipo de encuentro.


Para saber con exactitud que delegación quedó fuera de las presentaciones que se harán el 23 y 30 de julio próximo, “se requiere un estudio exhaustivo de las danzas”, un trabajo que no interesaría por tratarse “de un espectáculo turístico”.


Sin negar que “a final de cuentas” las presentaciones en el Auditorio Guelaguetza contribuyen al orgullo “de ser de Oaxaca”, aunque éste se limite al mes de julio, reconoció que hay aciertos como integrar a la delegación de San Andrés Zautla.


Los representantes de ese municipio de los Valles Centrales presentarán la danza de los jardineros que antes se bailaban en otros municipios como San Bartolo Coyotepec, pero que con el tiempo dejaron de ejecutarse.


El propio José Luis Pérez recuerda haberla visto en su infancia y vuelto a presenciar en la fiesta patronal de Zautla, desde donde transmitió su programa de radio por Internet.


Criticó que haya una suerte de “cliché” para que sólo se bailen “ciertas danzas” cuando el programa debería estar nutrido con la representación de todas las regiones, incluyendo los pueblos negros.


Si éstos no participan porque no enviaron solicitud, representaría entonces que la visita a las comunidades se convierte en un “casting” nada democrático.


“Están quienes quieren y tienen la posibilidad de estar”, cuando Oaxaca tiene tanta diversidad cultural y “terminen por inventarse cosas” o añadidos a vestuarios para hacerlos más vistosos, el uso excesivo de maquillaje o que las mujeres tengan que sonreír durante bailes que originalmente son solemnes.


Lamentó que desde el 2011 a las dos delegaciones de las Chinas Delegaciones se les diferencie por un nombre: “Es patético porque tienen la misma ubicación geográfica y entre ellas imponen diferencias como el uso de mascada floreada o lisa, o la blusa de San Antonino Castillo cuando antes era de bolillo, porque era gente sencilla”.

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