A nivel nacional, el sector productivo dedicado a la preparación de alimentos y bebidas, es el primer generador de empleos en lo que se refiere a la iniciativa privada, lo cual se refleja en la entidad, señaló el presidente en Oaxaca de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Onésimo Bravo Hernández.
Este sector es uno de los más importantes empleadores y sólo se encuentra por debajo del gobierno federal, resaltó el representante de los restauranteros en la entidad, después de subrayar que la cocina mexicana y oaxaqueña, en lo particular, son un producto turístico invaluable.
Bravo Hernández aseveró que la industria restaurantera es la única que trastoca en un 90 por ciento todas las cadenas productivas.
Gran impacto económico
“Quienes tienen un negocio de preparación de alimentos requieren de una cantidad infinita de bienes y servicios, para lo que acuden a diversos sectores productivos, desde el fabricante de muebles y todo lo necesario para equipar un negocio, hasta del agricultor”, detalló.
La cocinera tradicional, Celia Florián, también reconoció el impacto económico que genera el sector dedicado a la gastronomía, pues los beneficios no son únicamente para quienes venden el producto final, sino que empieza con el productor.
En ese sentido, apuntó que los restaurantes de la capital se proveen de sus ingredientes en el mercado de abasto, donde se encuentra infinidad de productos.
Enormes beneficios
El integrante de la Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto, Emilio Carreón Cervantes, señaló que la industria restaurantera genera entre los proveedores de frutas y verduras el 70 por ciento de las ventas, aproximadamente.
El comerciante del mercado de abasto indicó que los clientes, restaurantes y hoteles, son de la capital y de la parte turística de la Costa oaxaqueña, por lo que los ingresos que se obtienen de estos compradores son de los más importantes.
En la capital, al menos 61 bodegas de frutas, verduras y florerías se benefician del sector productivo de alimentos.
Patrimonio cultural
La manifestación de los sabores de Oaxaca están presentes desde los mercados, restaurantes y en las calles, y aunque desde siempre ha sido un atractivo turístico, fue a partir del 2010 cuando la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró a la comida mexicana Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Beneficiada de ese nombramiento, la cocina oaxaqueña registró un boom, indica la cocinera Celia Florián, quien apuntó que a nuestra comida no sólo se le reconoce por sus sabores, también recibe honores por los procesos y técnicas ancestrales, así como emplear especies endémicas.
Por su parte, el presidente de la Canirac en Oaxaca, Onésimo Bravo, celebró que la cocina mexicana reciba un lugar importante a nivel mundial y que las autoridades en México hayan hecho de ésta un atractivo turístico.
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Para recordar:
La cocina tradicional mexicana es un modelo cultural completo que comprende actividades agrarias, prácticas rituales, conocimientos prácticos antiguos, técnicas culinarias y costumbres y modos de comportamiento comunitarios ancestrales, dice la Unesco.
