SANTIAGO TILANTONGO, Nochixtlán, Oaxaca.- Durante 33 años los habitantes de este municipio de la Mixteca Alta han luchado contra la erosión y sus efectos: falta de agua, escasa producción agropecuaria, pobreza y marginación. La lucha no ha sido fácil, pero hoy los resultados de la titánica tarea están a las vista, más del 60 por ciento del territorio rescatado y verdaderos bosques en la comunidad.
Dos campesinos han sido fundamentales en este trabajo, Aarón Fidelio Santiago Cruz y Joaquín Fidel Cruz Pablo, quienes en 1983 conocieron a un grupo de refugiados guatemaltecos que los motivó, capacitó y coordinó para emprender la reforestación de la región.
Al recorrer ahora los bosques sembrados de pinos, ramones, manzanita, ocotes, encinos, lazarillo y elites, señalan que es su herencia para su pueblo. “Es algo que quisimos hacer para nuestra comunidad, para que nuestros hijos y nietos conozcan cómo eran antes estas lomas”.
En la actualidad junto a la reforestación promueven el cultivo alternativo de maíz y árboles frutales en laderas, como una forma de retener la tierra y favorecer la humedad, porque la lucha no cesa, por el contrario día a día adquiere nuevos derroteros.
EL ORIGEN
En la comunidad El Progreso, Santiago Cruz comenta que allá por 1982 llegó a la comunidad de Yucunicoco un grupo de guatemaltecos a fin de capacitar a los campesinos en la agricultura ecológica.
Un año más tarde acudieron al municipio de Tilantongo y ahí desarrollaron el programa. “Un guatemalteco de nombre Anacleto nos enseñó y convenció, a pesar de que el pueblo no creía que iba a funcionar”.
Señala que al inicio el principal problema fue convencer a los chiveros de controlar su ganado. “Muchos no quería, pero a poco se fueron convenciendo de que era necesario para que los árboles lograran crecer”.
Añade que los guatemaltecos les enseñaron a armar el aparato A, para los trazos y nivelación de zanjas, a fin de retener el agua y la tierra. “Nos decía que en 10 o 15 años íbamos a ver los resultados de nuestro trabajo, por eso nos preguntábamos si se sembrarían frutales, pero ahora entendemos que se refería a madera, leña y abono”.
Subraya que en esta comunidad se ha logrado recuperar el 60 por ciento de la extensión territorial de la erosión, “porque lo importante es que este trabajo se logró extender a todas las comunidades del municipio”.
LOS PROBLEMAS
Reconoce que no fue fácil convencer a sus vecinos de participar en las actividades de reforestación. “Con las personas que cuidaban chivos tuvimos fuertes problemas de 1983 a 1987, hasta que se logró reducir el pastoreo, por el convencimiento de la gente, y ahora únicamente tres personas tienen chivos”.
Afirma que a pesar de todo lograron convencer a la gente de la necesidad de recuperar los suelos. “Cuando iniciamos el proyecto nos llamaron locos y ahora en algunas reuniones les comento que los locos al fin contagiaron la locura y fue buena, porque ahora se refleja en el beneficio del pueblo. Hoy la misma gente se organiza para reforestar y cuidar sus bosques”.
Manifiesta que a partir de 1997 el convencimiento de la gente y el apoyo de la Secretaría del Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) permitió que los trabajos de reforestación avanzará significativamente. “Hoy la reforestación es vista por la gente como una necesidad y trabaja en ella”.
LA DEGRADACIÓN DE LOS SUELOS
“Yo recuerdo que en 1967, 68, 69, muchas de estas tierras estaban erosionadas, desgastadas, llenas de cárcavas, pero poco a poco fueron cubriéndose de vegetación y ahora el panorama se ve muy distinto; yo tengo fotografías de cómo estaba la zona antes y no se reconoce”, dice Cruz Pablo.
Expresa que muchos no pueden creer lo que se hizo, “pero quienes trabajamos en esto sabemos cómo estaba, cómo lo encaminamos y cómo está ahora; en verdad los suelos estaban degradados, perdidos”.
Afirma que inició estos trabajos en Tilantongo para que fuera una escuela de lo que se debía hacer. “Yo empecé por mi terreno, pero el asunto no quedó ahí seguí promoviendo la reforestación, me metí a otras comunidades como Buenavista, El Carmen, La Providencia, Tres Lagunas, La Paz, Guadalupe Hidalgo, Zaragoza y San Antonio, entre otras”.
En tanto, Santiago Cruz da a conocer que ahora están aplicando el cultivo alternativo de granos básicos con frutales, a fin de retener el suelo y la humedad. “Esto tiene un doble propósito: cosechar frutas y producir nuestros alimentos, como el maíz, trigo, frijol; además de rescatar suelos y evitar la erosión”.
Señala que en la Mixteca Alta no existen terrenos planos, entonces este sistema se adapta a los cultivos en laderas. “Se traza a curva de nivel y se plantan a un metro de distancia árboles frutales, luego los surcos de maíz; cada línea de frutales está a 10 metros de distancia, los frutales deben estar cerca para que sus raíces se entrelacen y retenga la tierra, incluso el rastrojo debe colocarse en la parte de arriba de los árboles para contener la tierra e infiltre el agua; así el agua no corre por la ladera”.
“Hoy la reforestación es vista por la gente como una necesidad y trabaja en ella”: Aarón Fidelio Santiago Cruz, campesino de Tilantongo
EL RECONOCIMIENTO
En 2002 la Comisión Nacional Forestal entregó el mérito ecológico al municipio de Santiago Tilantongo por sus trabajos de reforestación.
LAS COMUNIDADES
7 comunidades llevan a cabo los cultivos alternativos de frutales con granos básicos.
LOS VIVEROS En el municipio de Tilantongo los campesinos han creado sus propios viveros, tanto de árboles frutales como de árboles nativos, como ramones, pinos, encinos, etcétera.
Las principales formas de desertificación de las 120 millones de hectáreas son: 18% de pérdida de fertilidad en zonas agrícolas, principalmente entre la península de Yucatán; 12% pertenece a la erosión hídrica, referente a la pérdida del suelo, resultado del agua de lluvia o la de riego, que afecta principalmente a zonas de sierra.
LA EROSIÓN
45% de las tierras afectadas por desertificación y degradación
18% por pérdida de fertilidad en zonas agrícolas
12% efecto de erosión hídrica
11% es por causa eólica
8% de pérdida es por la salinización,
