CIUDAD DE MÉXICO.- Por sus manos han pasado Mariah Carey, Sting, Kanye West, Katy Perry, Keith Richards, Rihanna y decenas de estrellas de talla internacional. A todos ellos los ha dejado satisfechos y con ganas de más.
Se trata de Dorothy Stein, una afamada masajista estadounidense cuya peculiar técnica incluye mordiscos en la espalda y hasta en el trasero de sus clientes.
La Dra. Dot (apodo cortesía de Frank Zappa) lleva 30 años ofreciendo este tipo de masajes, aunque al principio los hacía a cambio de boletos gratuitos para conciertos.
Los primeros clientes quienes atendió en backstage, cuando ella tenía 15 años, fueron los integrantes de la banda Def Leppard.
"Yo quería entrar gratis a conciertos y conocer a los músicos que compusieron canciones que eran tan cercanas a mi corazón. Y las opciones para conseguirlo era dar sexo oral, dinero o masajes. Así que escogí los masajes", cuenta a The Mirror.
Dorothy empezó a usar sus dientes con fines terapéuticos a los 5 años, pues como no tenía suficiente fuerza en las manos, su mamá le pedía que la mordiera.
"Así que básicamente he hecho esto toda mi vida", bromea.
Su reputación como masajista fue creciendo, y asegura que entró a unos 3 mil conciertos gratuitos gracias a su "don".
"En 1994, Charlie Watts, el baterista de los Rolling Stones, insistió en que debía empezar a cobrar si deseaba que me tomaran en serio. De hecho, él fue el primer cliente que me pagó.
"Después acompañé en tres tours consecutivos al grupo, ya con paga. Originalmente sólo iba a masajear a Charlie, pero acabé atendiendo a todos", recordó Dorothy en un artículo que escribió para el sitio refinery29.com.
Actualmente, sus tarifas empiezan en el equivalente a 2 mil 600 pesos por 60 minutos. Pero si es después de las 22:00 horas, sube a 3 mil 700, y después de la medianoche cobra 4 mil 600. Ahora que si se solicitan sus servicios de las 2:00 de la madrugada en adelante, el precio es de 5 mil 500.
Pero, a juzgar por los testimonios de estrellas como Bruce Willis, Debby Harry, Vin Diesel, Carlos Santana, Dave Navarro o Paris Hilton, su trabajo vale cada centavo.
La Dra. Dot está certificada como masajista y maneja varias técnicas, pero asegura que muchas celebridades, como Sting y Simon Cowell, prefieren la especialidad de la casa, es decir, los mordiscos.
"Obviamente, le pregunto a cada persona si quiere probar primero, y antes de aplicarle aceite le muerdo toda la espalda de arriba abajo, en un movimiento fluido. Le muerdo el cuello y los hombros, y a veces los glúteos.
"Nunca he lastimado a nadie; de hecho, es una experiencia divina para el cliente, es una sensación que nunca han experimentado antes. Se lanzan a lo desconocido y ponen su confianza en mí", asegura.
Incluso hay algunos clientes que solicitan que vaya más allá...
"Hay una rockera que me pide que masajee sus senos. Pero, eso sí, nunca he mordido las bubis de nadie", aclara.
En cuanto a los olores o las distintas respuestas corporales de sus clientes, bueno, no es algo que le moleste.
"He visto y olido de todo", afirma.
Actualmente, Dorothy puede presumir que ha entrenado en su peculiar método a unas mil personas que ofrecen sus servicios en varias partes del mundo (sí, en México también). ¿Así que quién dijo yo?
Se entregan a sus manos
Actualmente, Dorothy Stein escribe un libro sobre sus experiencias como masajista de famosos.
+ El cantante Gregg Allman le obsequió un collar de diamantes de Tiffany en reconocimiento a su trabajo.
+ Vince Neil, de Mötley Crüe, le dio un anillo de cuero con estoperoles en 1984, sin saber que ella era novia de Joey Ramone.
Bruce Willis le dio una vez una propina de mil 700 pesos para que su hija se comprara unas tortugas.
Katy Perry es de sus clientas frecuentes.
Cuenta que masajeó a Mariah Carey hasta las 6 de la mañana.
Sting y Simon Cowell prefieren la modalidad con mordiscos.
