La cuenta regresiva comenzó. A siete meses del inicio de la Copa del Mundo, a la Selección Mexicana le urge recuperar la memoria futbolística de los primeros dos años de la gestión de Gerardo Martino.
México regresó a los antiguos vicios: la fragilidad a balón parado y la falta de contundencia, aspectos por los que Estados Unidos lo hizo pagar 3 veces en 2021, aunque ya en la recta final de la eliminatoria mejoró notablemente en su quehacer defensivo, con 5 juegos sin recibir gol.
Héctor Herrera destaca ya con el Atlético de Madrid justo cuando ha aceptado la oferta del Houston Dynamo de la MLS, así que la gran esperanza del Tri pasará por el momento que vivan Raúl Jiménez, Hirving Lozano y Jesús Manuel Corona en el Wolverhampton, Napoli y Sevi-
lla, respectivamente.
El equipo juega con un sistema táctico muy rígido y, por ende, predecible. El “Tata” tiene tiempo suficiente para mejorar la propuesta en la media cancha y que exista mayor dinamismo.
Martino tiene 7 meses para formar un cuadro competitivo que pueda competir contra Arabia Saudita, Polonia y, sobre todo, Argentina.
