Las calamidades quedaron atrás y Sergio Pérez volvió a demostrar la calidad que tiene como piloto, al terminar en la tercera posición del Gran Premio de Hungría.
Fue el podio número 32 para el piloto mexicano en la máxima categoría del automovilismo de pista, e igualó a Daniel Ricciardo, Jean Alesi, Jim Clark y Jacques Laffite.
Los ajustes que hizo el piloto tapatío junto a su equipo, rindieron sus frutos desde las tandas de prácticas libres y la clasificación.
Checo arrancó en la novena posición y desde ahí fue atacando a los pilotos que tenía por delante.
De a poco fue dejando a los rivales por detrás. Fernando Alonso, Charles Leclerc y Carlos Sainz, sucumbieron ante las maniobras del piloto mexicano.
Para la vuelta 51, el tapatío se adueñó de la tercera posición, gracias a que Hamilton entró a pits y perdió el segundo sitio en el que se encontraba, por lo que esto hizo que Checo se adelantara a la tercera plaza.
