Isela Sedano
Diego Rodrigo Alfonso Jiménez es un artista oaxaqueño cuyas obras de su repertorio abarcan una amplia gama de instrumentos, desde teclados de percusión y parches, hasta escultura y objetos sonoros; sus especialidades son la multipercusión y percusión teatral con electrónica.
A través de los años, Diego ha desarrollado su visión acerca de la comunión entre las artes escénicas, lo que ha llevado el planteamiento de su trabajo multidisciplinario hacia la investigación y propuestas que reúnan estas formas de concebir la música como una obra de arte total.
Egresado de la Licenciatura en Música por la Facultad de Música de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); especializado en el área de Música Contemporánea con Tecnologías, Diego ha colaborado con artistas de México, Argentina, Colombia, Brasil, Uruguay, Estados Unidos, Hong Kong, Taiwán, Francia, Italia y Países Bajos, presentándose alrededor del Continente Americano en diversos foros, festivales e instituciones públicas y privadas.
Asimismo, con apoyos y becas al alto desempeño académico y calidad interpretativa, Diego ha participado en seminarios de perfeccionamiento y especialización en música contemporánea, arte sonoro, performance e improvisación.
En el año 2022, Diego obtuvo una beca completa para la realización de un intercambio académico internacional con sede en la Universidad de la República de Montevideo, Uruguay.
Desde el año 2015 se desempeña como solista de percusión contemporánea y actualmente se encuentra de gira nacional presentando su concierto solista “Yo le llamo música”; otra colaboración destacada la realizará con el compositor estadounidense doctor Luke Carlson, director del programa de composición clásica en el Conservatorio de Ozark de Missouri (Estados Unidos), mismo lugar donde se realizará el estreno mundial del proyecto interdisciplinario “Gamer” para multipercusión solista, electrónica y performance.
Además, trabaja con el escultor alemán Lukas Khüne en el proyecto de esculturas sonoras monumentales titulado “Sonos”, inspirado en teclas de la marimba tradicional mexicana, en el que exploran los sonidos subgraves y el uso del espacio físico como un medio para integrar la percepción sonora y holística.
Además de la música, en su tiempo libre, Diego disfruta de la investigación en temas como: Filosofía, Historia del Arte y Estética, en las cuales se apoya para la creación de textos y material de video que aporta a su área de investigación como lo es la música contemporánea y a la vez nutren su labor como artista joven, así como la práctica del yoga, meditación y mindfulness.
Diego creció en un hogar sensibilizado al arte, al estar en contacto con disciplinas como el teatro, artes plásticas y danza contemporánea, volviéndose parte de su vida diaria.
El artista oaxaqueño comenzó desde muy pequeño en clases de iniciación musical. Por ello, Diego crece con una fascinación y afinidad hacia el ritmo y el movimiento, cosa que le dificultó su paso por la escuela, ya que sus profesores lo confundían con hiperactividad o rebeldía, buscando arduamente una actividad que saciara su necesidad de expresarse artística y personalmente, encontrando así todas las expresiones del arte escénico con las que interactuó en distintos momentos de su vida.
El ritmo con panderos, claves, güiros, sonajas, tambores y platillos, fue siempre el favorito de Diego, reconociendo en la diversa música su talento desde pequeño; hoy es un honor escucharlo; Diego se apropia de su doble herencia latinoamericana y explora su identidad; ha dedicado 14 años de estudio profesional y sigue preparándose y deleitándonos con su música. Es un honor que sea oaxaqueño.
“A través de mi música, conduzco al público a mi propio mundo, el más profundo y sincero”.
Diego Alfonso, Artista
