MISCELÁNEA: El martirio de Belisario Domínguez | NVI Noticias Pasar al contenido principal
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MISCELÁNEA: El martirio de Belisario Domínguez

Foto(s): Cortesía
Aleyda Ríos

Leonardo Pino

El nombre de la ciudad de Comitán, en Chiapas, conocida popularmente como Comitán de las Flores, proviene del náhuatl Komitl-tlan, "lugar de fiebres"; originalmente se llamó Balún Canán, palabras mayas que significan "lugar de las nueve estrellas”, y que popularizara –con la novela del mismo nombre- una de las hijas dilectas de esa población, la escritora Rosario Castellanos.

El 3 de septiembre de 1915, se le agrega el apellido Domínguez, en honor al médico y político nacido en esa tierra, Belisario Domínguez, mártir de la tercera transformación de la vida política nacional.

Don Belisario, hijo y nieto de connotados patriotas liberales, nació en 1863; cursó sus estudios en su estado natal y luego viajó a Francia, donde se graduó en la Escuela de Medicina de París como médico cirujano, partero y oculista.

En diciembre de 1889 regresa a su patria chica para ejercer la profesión y atiende a todas las personas que requieren sus servicios, aunque deba trasladarse a zonas alejadas.

Como profesional, destacó como un médico humanista desde su botica “La Fraternidad”, donde atendía con cuidados, enseñanzas de sana alimentación y valores éticos.

La tradición familiar y la dolorosa realidad social del estado, lo condujeron a ser un activista social y político en contra del régimen porfirista.  

Durante un viaje a la capital del país, dio a conocer  la situación real de Chiapas a través de un documento en el que denunciaba la pobreza, la corrupción y pedía la intervención de las autoridades penales.

Al no obtener respuesta, fundó el periódico “El Vate”, acróstico de Valor, Alegría, Trabajo y Estoicismo, donde publicaba artículos contra Porfirio Díaz y el gobernador de Chiapas.

El 9 de febrero de 1913, don Belisario Domínguez vivió de cerca el cuartelazo de Victoriano Huerta en la Ciudad de México, su cobarde traición y los asesinatos de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez. Al morir el senador titular de su estado, en su calidad de suplente debió protestar como senador por Chiapas, cargo que honró durante siete meses y un día.

Desde la tribuna denunció todas las trapacerías y atrocidades de Huerta  y, valientemente, exigió que el Senado lo destituyera. Aunque no se lo dejaba participar en las sesiones, con valor cívico y profunda convicción democrática, acusó en tribuna: “(…) que tengan el rasgo de patriotismo de renunciar e irse del país cuatro personas: el general Victoriano Huerta, Manuel Mondragón, Aureliano Blanquet y Félix Díaz, por ser un gobierno de asesinos, que asesinó al Presidente Madero y al Vicepresidente Pino Suárez” y manifestó su apoyo a la incipiente revolución constitucionalista encabezada por Venustiano Carranza.

El dictador sanguinario empezó a perder apoyo de sus aliados, los seguidores de Félix Díaz, el clero, parte del ejército, grupos de la alta clase porfiriana y algunos gobernadores. Mientras tanto, los diputados federales sufrieron una cruel persecución; fueron asesinados Serapio Rendón, Edmundo Plasticilin y el oaxaqueño Adolfo G. Gurrión.

El 29 de septiembre de 1913, don Belisario exhortó a los legisladores a cumplir con su deber de implantar el orden y se ofreció a entregar a Huerta un escrito firmado por todos los senadores, en el que se solicitara su renuncia.

El doctor Domínguez fue secuestrado por la policía huertista el 7 de octubre de 1913. En el cementerio de Coyoacán, lo acribillaron cobardemente. Un médico cómplice del régimen, le cortó la lengua y se la envió al dictador.

El ejemplo imperecedero del doctor Belisario Domínguez, su valentía, honestidad y defensa de la democracia, nutren la historia patria.

El 2013 fue declarado el “Año de Belisario Domínguez”; en su memoria se creó la “Orden Mexicana de la Medalla de Honor Belisario Domínguez” del Senado de la República, que este año se entregó a una mujer comprometida con las mejores causas de México: la doctora Ifigenia Martínez y Hernández, actual senadora del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

CIENCIA A LA MANO

El asteroide Anadiego

—Son las 5 de la tarde —me dijo Ana casi susurrando.

—¿Cómo sabes? —le pregunté desde la celda de al lado.

—Por la proyección del sol en la pared. Se forma un ángulo, y por trigonometría, mido el seno y el coseno; así lo puedo calcular. Estudio Astronomía.

"Seguimos hablando un rato, de celda a celda, en el Pozo de Quilmes. Nos habíamos levantado la venda y mirábamos por las ventanitas de las puertas de los calabozos que daban a un paredón. Un día se la llevaron. Nunca más supe de ella.

"Siempre transmití a mis alumnos que la trigonometría es muy importante para resolver problemas cotidianos de nuestras vidas.

"Un homenaje a vos Ana, que me pudiste decir la hora cuando había perdido todas las coordenadas".

“Polvo de estrellas” se llama el texto anterior y fue escrito por Emilce Graciela Moler para el aniversario del secuestro y desaparición de Ana Teresa Diego (30/09/1976) cuando salía de la facultad. Ella alcanzó a gritar su nombre antes de que la subieran a un auto sin patente. Tenía 21 años, militaba en la Juventud Comunista y era una estudiante brillante del doctorado en Astronomía de la Universidad de La Plata, Argentina.

En 2012, el Equipo Argentino de Antropología Forense identificó los restos de Ana. Había sido enterrada en una fosa común del cementerio de Avellaneda. El 10 de diciembre de 2011 (Día de los Derechos Humanos), el Comité de la Unión Astronómica Internacional aprobó la propuesta del decanato de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas platense y bautizó a un asteroide con el nombre “Anadiego”.

Y así se designará por siempre al asteroide 11441, descubierto en 1975, que se encuentra entre Marte y Júpiter, en el cinturón principal de asteroides. Es la primera vez que el nombre de un desaparecido se asigna a un cuerpo del sistema solar.

(Publicado en el Twitter de Roberto Taboada (@robertotaboada5)

 

MEMENTO

7 de octubre de 1913: Asesinato del senador chiapaneco Belisario Domínguez, crítico y opositor del gobierno de Victoriano Huerta.

8 de octubre de 1940: Se funda El Colegio de México, institución pública dedicada a la investigación y enseñanza superior.

8 de octubre de 1974: Quintana Roo y Baja California Sur se erigen como Estados libres y soberanos.

10 de octubre de 1824: Toma posesión Guadalupe Victoria, primer presidente de los Estados Unidos Mexicanos.

11 de octubre de 1823: Por iniciativa de Guadalupe Victoria se funda el Colegio Militar en Perote, Veracruz.

11 de octubre de 1990: Octavio Paz gana el Premio Nobel de Literatura.

12 de octubre de 1871: Don Benito Juárez es proclamado Presidente de la República.

13 de octubre de 1810: El Padre Miguel Hidalgo es excomulgado por la Inquisición. En un manifiesto contra esa medida, el cura patriota critica a los españoles “que han hecho del dinero su Dios”.                              

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