Por Reina Bautista
"De aceite, sulfuro y nitrato caído del cielo" de Marcel Rius, curada por Gerardo Montiel Klint, "Kiri" (la bruma) de Efraín Constantino y "Popocatépetl" de Tomas Casademunt, curada por Mariana Rubio, son las exposiciones que se inauguraron este viernes en el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo (CFMAB).
Rius presenta una serie de retratos de diablos que son parte de distintas festividades en las comunidades de Oaxaca. El curador de la exposición escribió en el texto que acompaña las imágenes que el fotógrafo “ha tenido durante su trayectoria una fascinación por los seres fantásticos. Se ha abocado a retratar seres imaginarios. Como si la realidad del día a día no fuera suficiente en esta existencia. Retrató a fanáticos personificando a seres de la película de ciencia ficción Star Wars. Ahora retrata a seres sobrehumanos caídos del cielo. Diablos que representan el cúmulo de todas las maldades en la vida terrenal. Iconos de poder, ambición y venganza. Reflejos de la condición negativa de nosotros los seres humanos”.
"Kiri" (bruma) de Constantino es una instalación de fotografía y video, sobre esta muestra el artista Luis Felipe Ortega comentó que en “Bruma se manifiestan abiertamente dos de los géneros más recurrentes en la historia de la representación: el paisaje y el retrato (autorretrato). Desde ahí han de generarse en este proyecto una serie de vínculos afectivos con esa historia. Efraín insiste en su relación con la fotografía japonesa, en particular con Araki Nobuyoshi y Moriyama, desde luego se dejan ver esos vínculos y los diversos aprendizajes, una crudeza abierta que quiere evitar matices: pienso sobre todo en los rostros de Moriyama, en los labios, los ojos, los gestos... la obra se torna honesta, quiere ser clara y asumir esa trama de relaciones, construir una plataforma desde la cual habrá de moverse con cierta libertad. Así que esos límites de los que habla Efraín se invierten para abrir camino hacia una potencia”.
"Popocatépetl", indicó Mariana Rubio, curadora de la muestra, “es parte del proyecto personal de Casademunt en torno a los volcanes de México. La exposición reúne 13 fotografías en gran formato, piezas únicas realizadas bajo la técnica del colodión húmedo. El espíritu del cerro que humea queda plasmado en el registro de la voz y la luz muda e invisible a nuestros ojos. La materialidad de las imágenes responde al tiempo. Una mezcla de alcohol y éter en una emulsión de celulosa extraída del algodón cosechado por el fotógrafo. El colodión húmedo es sensible a la temperatura y absorbe los rayos ultravioleta, un fragmento del espectro de luz visible para los pájaros e insectos que nuestra mirada materializa sólo a través de la viscosidad de la plata en estas fotografías. Así, la huella del corazón de fuego se vuelve latente”.
Las exposiciones pueden ser visitadas desde este viernes 10 de marzo a las 17:00 horas y estarán hasta el 5 de mayo de 2023. Las salas de exhibición abren de miércoles a lunes, en un horario de 9:30 a 19:00 horas.
