Texto y fotos: Carina Pérez García
SANTO DOMINGO BARRIO ALTO, Etla, Oaxaca.- En el Mogote de humo, cerca de la tierra quemada y abonando a su transformación, 19 artistas enuncian sus propuestas de land art en las que sugieren desde un espacio para el descanso y la meditación, hasta la posibilidad de pedir deseos a las constelaciones y mirar el cielo en espejos de agua; otras denuncian las ausencias de mujeres desaparecidas, la violencia y los feminicidios. La experiencia en la que participan integrantes de Arte Mujer Oaxaca (ArMO) ya se puede visitar y este día compartimos impresiones de las creadoras sobre sus piezas.
“Mi pieza tiene que ver con las ausencias, el vestido es el rastro que dejaron dos amigas de las que tenemos más de dos años de estar buscándolas, están desaparecidas. Pero también es una pieza dedicada a las mujeres asesinadas y desaparecidas. Alrededor del vestido elaboré un lauburu, este símbolo vasco de protección, como una petición de protección para las que seguimos aquí”.
Miriam Ladrón de Guevara, artista.
“Cuando nos trajeron aquí, esto era un tiradero de piedras, un montículo y un incipiente muro lateral. Así que me puse a recoger las piedras, las puse por tamaños y de repente me percaté que había una figura que tienen los jardines zen: la cascada seca. Lo increíble es que cuando terminé de colocarlas, ya no había más piedras, todo estaba perfecto, sin planearlo. Me gusta que mi pieza tenga una cascada porque emula el agua; es una invocación. El río que corre, que cambia, nos recuerda que hay que aprovechar la vida, porque no se puede repetir. Este es un regalo para la gente de la comunidad y los visitantes, se pueden sentar en los banquitos de madera y descansar el pensamiento de la vida cotidiana. Este jardín zen es un ofrecimiento”.
Julia Barco, artista.
“Mi propuesta son tres piezas, dos de ellas relacionadas entre sí. Estos tres mogotes tiene que ver con el cinturón de orión, que los egipcios consideraban las puertas del cielo. Estos tres cerros están dedicados a conectar con esas tres estrellas de Orión, en algún punto se alinean, como las pirámides de Egipto. Otro sitio de mi pieza, es un hueco en la tierra, en donde te puedes meter para pedir deseos desde aquí. Por un lado está el hábitat de la creatividad y por otro el de la destrucción”.
Ana Santos, artista.
“Mi pieza tiene que ver con la contemplación del cielo en el agua. Esta pieza es para ello, para ver el reflejo del firmamento en el agua; además, aquí están las constelaciones. La idea es ver el paso del firmamento y los astros alrededor”.
Lucero González, artista.
“En mi pieza Capulla Ātl: vida y memoria hago una intervención en sitio específico con semillas de flores de cempasúchil y maíces criollos de Oaxaca, encapsuladas en una serie de 18 capullos de hielo y un dibujo de flor sobre nieve, todo a orillas de un río canadiense, siguiendo el diseño de la topografía del lugar. La intención es entablar un diálogo con la naturaleza que abraza el corazón de Tlalli, la tierra”.
María Luisa de Villa, artista.
“Estoy impresionada con lo que las artistas de ArMO han hecho en este espacio maravilloso con una vista impresionante. Ellas han puesto su creatividad al servicio del arte de la tierra. Juntaron voluntades e hicieron un trabajaron artístico para dejar a Santo Domingo Barrio Alto, que tiene esta montaña, un gran legado. Aquí, la comunidad ha comenzado a sembrar árboles para recuperar lo que han perdido durante siglos y respecto a la exposición, hay de todo, son 19 artistas consagradas que han dejado una obra impresionante para Oaxaca”.
Margarita Dalton, historiadora e investigadora.
