CIUDAD DE MÉXICO.- Los sistemas estatales de pensiones se tambalean. Nueve entidades ya agotaron los recursos disponibles para el pago de pensiones o tienen una reserva máxima de cinco años, de acuerdo con especialistas y estudios de consultoras.
Chiapas, Durango, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí, Nuevo León y Chihuahua ya no tienen suficiencia para el pago de la pensiones de sus servidores públicos.
En Tabasco y el Edomex, las reservas durarán sólo cinco años, de acuerdo con estudios de las consultoras ARegional y HR Ratings.
Por si fuera poco, también se prevén crisis en Colima, Morelos y Querétaro, pues no cuentan con sistemas de pensiones, es decir, los trabajadores no hacen contribuciones, por lo que los recursos salen del gasto corriente de los gobiernos estatales.
En promedio, cada entidad paga 498 millones de pesos anuales en pensiones. En Querétaro, por ejemplo, el gasto se incrementó en tres años en 200 millones de pesos.
"Este tipo de shock no lo resiste ninguna finanza pública por muy bien manejada que esté", advirtió Jorge Castillo, coordinador de Deuda y Finanzas Públicas de ARegional.
Morelos, refiere el estudio dicha consultora, gasta más en pensiones que en becas educativas.
Más focos rojos
También hay focos rojos en 10 estados que manejan el sistema de beneficios definidos, los cuales se volverán inviables en los próximos 6 a 15 años.
"Cuando hicieron sus leyes, que datan de 1950, tenían pocos pensionados y muchos trabajadores cuyas aportaciones financiaban las pensiones. En 15 años, van a tener más pensionados que trabajadores", indicó Castillo.
Hace 16 años, por cada jubilado, existían cuatro trabajadores. Con el cambio demográfico, estimó que en 2030 habrá sólo un trabajador por jubilado.
De acuerdo con un reporte de HR Ratings, Chiapas, Nuevo León y Chihuahua ya agotaron sus reservas, por lo que tendrán que hacer aportaciones extraordinarias, las cuales se desviarán de otros rubros.
Coahuila, Oaxaca y Yucatán tienen hasta 2025 para reformar sus sistemas de pensiones y ser viables.
Alejandra Macías, investigadora en Seguridad Social del CIEP, alertó que el acelerado envejecimiento de la población, junto con el crecimiento del gasto en pensiones, también pone al Gobierno federal en un panorama crítico.
