La profesora, Jazibe Belém LA, negó que haya participado en el delito de corrupción de menores de cinco niños en el jardín de Niños “Miguel de Cervantes” ubicado en la Villa de Etla y quedó en prisión mientras se determine su situación jurídica
Jazibe Belén fue localizada en el estado de Veracruz tras 14 años de estar prófuga de la justicia y por lo cual ahora fue presentada ante el juez que libró la orden de aprehensión en el sistema tradicional y por lo cual ayer fue la audiencia de declaración preparatoria.
Ante el juez, Jazibe mencionó que no era cierto de estar implicada en el ilícito, ya que ella era auxiliar y era la encargada de llevar a los niños al baño y los vigilaba para no sufrieran algún accidente cuando estaban jugando.
Sobre el caso, en julio del 2008, el Primer Tribunal Unitario del Décimo Tercer Circuito Federal confirmó el auto de formal prisión por corrupción de menores a Domingo RR y a su esposa Margarita JG, propietarios del Instituto Miguel de Cervantes en la Villa de Etla, Oaxaca, así como a sus hijos Erick y Alejandro RJ, quienes también laboraban en el jardín de niños.
De acuerdo con el Código Penal Federal los acusados podrían alcanzar una pena de 7 a 12 años de prisión.
Las denuncias fueron realizadas en el mes de abril del año 2007 cuando la madre de un menor de cinco años que acudía al Instituto Miguel de Cervantes decidió presentarse ante un agente del Ministerio Público y por lo cual el 16 de mayo del 2007 fue detenido el profesor, Domingo, logrando su libertad al pagar 10 mil pesos de fianza.
Pero hubo otras denuncias por pederastia y por lo cual Domingo fue detenido al señalado del citado ilícito y además hubo pruebas que las víctimas fueron contagiadas de herpes tipo dos, una enfermedad de transmisión sexual.
A través de recursos legales, el pederasta logró que su delito se redujera de violación a abuso sexual, lo que llevó a las tres madres de los menores a unirse y decidieron acudir a la Procuraduría General de la República por la apatía de las autoridades oaxaqueñas.
Con ayuda psicológica, los niños pudieron expresar que el profesor Erick Ramírez era el encargado de someter a los pequeños “inyectándoles posiblemente droga”, mientras que el profesor Alejando les tomaba fotos en presencia del padre de ambos, Domingo Ramírez.
Se presume que los abusos ocurrían en la parte trasera de la casa habilitada como escuela, con la complicidad de Margarita J. y la profesora Jazibe Belem L. A.
