Guadalajara, Jalisco- Se quedaban solos mientras su joven mamá salía a conseguir algo para comer. La mujer no tenía empleo, por lo que comúnmente dejaba por varias horas a sus pequeños en su vivienda. Desafortunadamente, la tarde de ayer ocurrió una tragedia.
Fue poco después de la 1:00 de la tarde del lunes cuando Personal de la Unidad de Protección Civil y Bomberos de Guadalajara, acudieron a una vivienda de tres niveles ubicada en la calle Insurgentes, casi esquina con Medrano, en los límites de los tradicionales barrios de Analco y San Juan de Dios, en Guadalajara.
Vecinos de la zona habían reportado al número de emergencias que uno de los pequeños cuartos de la planta alta de dicho inmueble se estaba incendiando y escuchaban gritos.
Mientras combatían el fuego, los tragahumos subieron por la azotea, ya que la puerta principal estaba cerrada, pero en ese momento la madre de los pequeños llegó, abrió la puerta e ingresó junto con los rescatistas al pequeño cuarto que le prestaban.
De inmediato los rescatistas tomaron al niño Santiago de Jesús, de tres años de edad, y a Brandon Daniel, de dos años, y los sacaron del lugar; tristemente, las llamas ya habían cobrado la vida de la pequeña Nadia, de un año, quien quedó totalmente calcinada.
Pero la tragedia no paró ahí, ya que cuando recibía atención médica Brandon Daniel murió.
El pequeño de 3 años de edad corrió con un poco de mejor suerte, si así se le puede llamar. Sufrió quemaduras de tercer grado en diferentes partes de su cuerpo, incluidas las vías aéreas, por lo que fue trasladado a un Hospital, donde se reporta con pronóstico reservado.
Vecinos comentaron que la joven madre de 22 años de edad, no tenía un empleo, por lo que comúnmente dejaba solos a sus hijos para ir en busca del sustento.
“Los dejaba solos. Es que nadie se los quiere cuidar por vaguillos”, dijo uno de los vecinos. “Todos los veíamos que a veces se le salían, corrían por toda la casa, en la calle encueraditos y todo, por eso la gente los conocimos, porque andaban en la calle”, comentaron.
Las autoridades aún no han determinado si el siniestro comenzó por alguna falla en la instalación eléctrica o si uno de los pequeños ocasionó accidentalmente el fuego.
