Fanny Mijangos Cortázar
Tercera de cuatro partes
Efectivamente, Manuel estaba sentado contemplando el rosal de siempre. Pablo se acercó y dándole una palmadita en el hombro le preguntó por qué no había entrado a clases. Manuel le dijo que había amanecido triste y en esos momentos prefería estar ahí.
–Manuel, ¿por qué te gusta tanto esa rosa?, ¿qué tiene de especial?
–Esta rosa se llama Baccará y es extraordinaria. Es una flor solitaria. Como puedes ver es la única del rosal y a pesar de parecer frágil, tiene una gran fortaleza. Resiste fuertes vientos y lluvias, y se adapta a temperaturas cálidas y muy frías.
–Además, es muy hermosa Manuel, es de un color rojo muy intenso.
–Sí. Obsérvala bien, parece un corazón hecho de pétalos, a veces, me parece que palpita y por eso se mantiene viva por mucho tiempo y en todas las estaciones del año. La puedes ver en primavera o en invierno.
–Qué bonito hablas de ella Manuel y sí, parece muy especial.
–Pablo – preguntó Manuel con los ojos muy vivaces- ¿qué te gustaría ser en otra vida si tuvieras esa oportunidad?
–Un tigre de Bengala – contestó Pablo con gran seguridad-. Son hermosos, imponentes y fuertes. Y a ti, ¿qué te gustaría ser?
–Una rosa Baccará.
Pablo sonrió y viendo a Manuel más contento, lo invitó a regresar a clases.
Una semana después, Pablo veía a Manuel muy cansado y decaído, mucho más que otras veces. Sabía que algo extraño estaba pasando, pero conociéndolo, esperaba que él mismo se lo dijera. Trataba de animarlo contándole historias divertidas, le llevaba pequeños regalos, veían una y otra vez sus libros de Botánica, pero el resultado nunca fue muy bueno. Un día en el recreo, cuando conversaban como siempre en el jardín, Manuel le dijo:
– Amigo: no voy a venir a la escuela por algunos días.
– ¿Por qué?
–Estoy enfermo.
–Eso suponía, pero nunca quise preguntártelo. ¿Qué te pasa?
–Nada importante, no te preocupes.
– ¿Cuánto tiempo vas a faltar?
–No lo sé.
– ¿Te puedo llamar a tu casa para saber cómo sigues?
–No voy a estar en mi casa, voy a estar en un hospital y ahí no puedes llamarme.
– ¿En el hospital? ¿Entonces en una enfermedad grave?
Continuará el próximo lunes…
