Los purificadores de agua existen desde hace mucho tiempo, pero en presentaciones industriales que procesan grandes cantidades de agua para purificarla y envasarla, ya sea en garrafones o en botellas de diferentes tamaños.
Los avances tecnológicos han logrado replicar los elementos de estos purificadores de agua en presentaciones más pequeñas que pueden incluso instalarse directamente en el suministro de agua que llega a la cocina de una casa.
Estos purificadores son pequeños y podría parecer que gracias a ello la cantidad de agua que pueden procesar es poca, pero nada más alejado de la realidad. El cartucho de esta clase de aparatos tiene una vida útil de aproximadamente 6 meses, después de los cuales se debe cambiar por uno nuevo y este puede purificar hasta 2200 litros de agua.
Un purificador para cada necesidad
El objetivo principal del purificador de agua es eliminar las partículas sólidas y los microorganismos, transformándola en agua segura para el consumo humano. Hay varios modelos diversos en el mercado, pero la diferencia radica precisamente en las necesidades de cada tipo de agua.
Los mejores purificadores se componen de una serie de filtros que pueden ir desde los 3 hasta los 5, estos filtros retienen elementos nocivos en cada uno, además de eliminar el posible sabor a cloro del agua.
Hay purificadores de agua que además de retener contaminantes, también pueden dar como resultado, agua alcalina. La alcalinización del agua consiste en elevar su pH por encima del valor neutro 7, en algunos casos estos purificadores pueden dotar al agua de un pH de hasta 8.5 grados, además, agregando minerales esenciales como sodio, calcio, magnesio y potasio.
Se ha dejado claro que estos purificadores eliminan los contaminantes que pueden estar presentes en el suministro de una casa u oficina, esto quiere decir que se conectan a la toma del agua potable.
Podría pensarse que el agua potable es limpia y segura pero la realidad es que este tipo de agua, aunque ha pasado por ciertos procesos de purificación masiva, no es segura para el consumo humano, sólo para procesos de limpieza, higiene o regado de plantas.
Cuando la calidad del agua es deficiente, dependiendo de las zonas, puede hacerse necesario el uso de un purificador más poderoso, en este caso, el purificador por ósmosis inversa es la solución ideal.
Ósmosis Inversa y plata coloidal
El purificador de ósmosis inversa tiene 5 cartuchos, en cada uno de ellos se retienen los elementos nocivos comunes que podrían estar presentes en el agua, pero también aquellos que son más peligrosos, como metales pesados que podrían ser el plomo, cromo y arsénico.
El purificador de ósmosis inversa también brinda agua alcalina. En los cartuchos se utiliza también plata coloidal, un elemento ampliamente empleado y de efectividad comprobada para purificar el agua de manera segura.
La plata coloidal ha sido utilizada durante mucho tiempo como bactericida ya que puede eliminar la presencia de hongos y virus, los cartuchos que contienen este elemento están especialmente diseñado para tener la cantidad exacta de plata y que no afecte a la salud.
Así que, si quieres purificar agua en casa de manera inmediata, optar por un purificador de agua es la solución más inteligente.
