Con un disparo en la cabeza, Cristian Uriel, de 40 años de edad, decidió terminar con su vida al encontrarse en su domicilio ubicado en el fraccionamiento Rancho Aguayo, en jurisdicción de Santa Cruz Xoxocotlán.
Lo que terminó con una noche de parranda, terminó en tragedia para Uriel y su familia.
Y es que desde la tarde-noche del domingo, comenzó a ingerir bebidas embriagantes en su domicilio.
Ya entrado en copas, durante la madrugada, su esposa Delia presuntamente le advirtió que dejara de tomar ya que el lunes tendría que laborar de manera normal.
Ese sería el motivo de una discusión entre la pareja.
Aproximadamente a las 03:30 horas, la pareja discutió otra vez, porque Cristian Uriel continuaba con la ingesta de alcohol.
Sin embargo, tras la discusión se dirigió a su cuarto supuestamente para ya descansar.
Cuando pensaban que todo había terminado ahí, de pronto su familia escuchó el estruendo de un disparo.
De inmediato, fueron a la recámara pero la encontraron con seguro por lo que tardaron algunos minutos para poder ingresar.
La familia de Cristian Uriel se llevó una desagradable sorpresa al encontrarlo sangrando de manera abundante en el rostro, con un disparo en la cabeza.
Por ello solicitaron apoyo de paramédicos de Protección Civil de Santa Cruz Xoxoxcotlán, quienes confirmaron que ya había fallecido.
Al lugar se presentaron más tarde policías municipales y elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) para iniciar con las diligencias de ley.
Finalmente, el cuerpo fue enviado al anfiteatro de la Fiscalía General del Estado para la práctica de la necrocirugía de ley.
Con relación a los hechos se inició la carpeta de investigación correspondiente.
