Pasar al contenido principal
x

Medicina: divorcio entre ciencia y clínica

Foto(s): Cortesía
Nadia Altamirano Díaz

23 de octubre, Día del Médico


La formación de médicos es marcada por la aspiración de la especialización clínica o el estudio de postgrado que permita acceder a mayor conocimiento y mejores sueldos. Para la mayoría, la investigación científica en salud está descartada.


Para Yamilet García no es opción la investigación, mucho menos volver a Huautla de Jiménez a ejercer como médica general, luego de egresar de la Facultad de Medicina y Ciguría de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO).


La estudiante, de 21 años y originaria de Huautla de Jiménez, vive en casa de sus abuelos desde hace 3 años y explica: “Quiero cursar una especialidad, no me asegura un mejor sueldo, pero las posibilidades de trabajar son mayores, quizá sí tendría un consultorio propio, pero no viviría en Huautla, porque ahí no hay oferta de trabajo”, expresó la alumna de tercer año para quien está claro que en las comunidades hay menos recursos para ejercer la medicina.


Otros profesionistas buscan conocimientos en salud


En Oaxaca son los químicos o biológicos quienes conforman un pequeño grupo de investigadores que buscan aportes a tratamientos médicos, pero con escasa participación de médicos de profesión.


La ausencia de especialistas en esa rama de la ciencia es para el investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) Agustín Lugo Radillo, un reflejo de la falta de contacto entre la investigación básica y los médicos en formación.


“El plan de estudios no los obliga a realizar investigación científica básica”, analiza el médico por la Universidad de Colima, quien además es doctor en medicina genética y molecular por la Universidad de Sheffield, Inglaterra.


Con él, son tres investigadores de la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) que cuentan con una formación como médicos.


“Los médicos investigando temas de salud tienen la ventaja de conocer el problema de primera mano en su consulta clínica habitual y la facilidad de integrar el conocimiento que van generando, trasladándolo al tratamiento”, opinó.


Falta difusión


El trabajo de investigación que se realiza desde esa institución fue reconocido a inicios de mes por los Servicios de Salud de Oaxaca, que entregaron el Premio Estatal en Investigación en Salud 2018, en la categoría de Investigación Clínica, a los investigadores Sergio Roberto Aguilar Ruiz y María de los Ángeles Claverini.


Ambos presentaron el proyecto Las Plaquetas Producen Defensina Alfa 1 y está Incrementa en Sepsis, pero ninguno de los dos tiene la formación de médico, lo suyo es especialización en química y biomedicina experimental.


El trabajo de investigación en salud es de gran relevancia, pero desde la aulas no se fomenta porque se piensa que no se aplica.


En el caso del trabajo que realizan Roberto Aguilar y Ángeles Claverini se centra en buscar “moléculas con actividad microbiana, porque se cree que las plaquetas tienen la función de evitar que nos desangremos ante la presencia de heridas, pero no sólo forman un tapón, sino que secretan proteínas y moléculas más pequeñas con capacidad de mejorar la respuesta inmune”.


Claverini consideró que en cualquier trabajo de investigación en salud es necesario que los médicos se interesen en contribuir para evitar “que se corte la información”, porque quienes en su mayoría la realizan no son médicos y, por ende, no tienen el contacto directo con pacientes para aplicarla.


Colaborar


Tanto pacientes como médicos, insistió, deben estar más conscientes de los beneficios que hay a largo plazo de propiciar la investigación en salud, ya que desde el aporte de muestras se desarrollan nuevos métodos de diagnóstico y tratamientos.


En opinión de Roberto Aguilar existe la creencia de que un investigador “va a encontrar la cura de algo”, lo cual requiere de muchos años y el trabajo de muchas personas en el mundo”.


Como coordinador de la maestría de biomedicina experimental, ve que son pocos los médicos que la cursan, dos de 16 inscritos en dos generaciones lo son, como la hematóloga Rocío Caballero Caballero.


“Es básico que un médico esté inmerso en la investigación, no es un plus sino una responsabilidad y necesidad que adquiere al tomar esta carrera”, expresó como maestrante interesada en la ciencia y la salud.


Su presencia en el Hospital de Zona número Uno del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)  la lleva a enfrentarse a diario con pacientes con cáncer “y, ante la impotencia del diagnóstico, surge la necesidad de encontrar más opciones para ellos, desde conocer la enfermedad a profundidad para hacer propuestas de tratamientos más oportunos".


Maestría en biomedicina se abre paso

La maestría en biomedicina molecular en la Facultad de Medicina pasó de ser un programa de nueva creación a uno de desarrollo nacional, el único postgrado de investigación en salud de todo el estado y se está creando el doctorado en biomedicina experimental.

Se pretende que en febrero de 2019 sea parte de los programas de desarrollo nacional, pero requiere mayor colaboración con los médicos que laboran en los hospitales, para sean ellos quienes la cursen, se involucren en la generación de nuevo conocimiento y dejen de ser una minoría de investigadores.

Noticias ¡Cerca de ti!

Conoce los servicios publicitarios que impulsarán tu marca a otro nivel.