De acuerdo con Daniel Nuñez, coordinador de la Asociación Civil Brigada Lobo, durante la pandemia han disminuido 60% las emergencias en las que están involucradas personas alcoholizadas.
Señaló que antes de la contingencia sanitaria por COVID-19 era común atender, en promedio, 5 emergencias durante la noche, por choques, atropellamientos o heridos en riñas.
Subrayó que estos porcentajes disminuyen cuando se instalan filtros de alcoholímetro pues ayuda a que menos personas conduzcan en estado etílico.
Afirmó que antes de la pandemia, 95% de los servicios de emergencia que atendían durante la noche era de eventos en los que estaban involucradas personas alcoholizadas.
“Ahorita disminuyeron estos tipos de servicios porque los antros están cerrados, la gente casi no sale, ya que antes durante la quincena o fines de semana no podían faltar este tipo de llamados”, recordó.
De acuerdo con el subdirector de Tránsito y Movilidad del municipio de Oaxaca de Juárez, René Ricárdez Limón, señaló que durante el periodo de enero a octubre de 2020 se suscitaron 876 accidentes viales, de los cuales 13 fueron causados al circular en estado de ebriedad o con aliento alcohólico.
“La mayor incidencia en hechos viales se da, de acuerdo a la estadística, por falta de pericia que se suscita por descuidos y el uso del celular mientras se conduce, principalmente, a esto le sigue el exceso de velocidad, así como la ingesta de bebidas alcohólicas y combinar el alcohol con el volante, resultando en este caso, en muchos accidentes fatales”, enfatizó el subdirector.
Daniel Nuñez afirmó que a pesar de esta disminución de emergencias, tienen llamados de otros tipos de eventos o accidentes, principalmente de pacientes sospechosos o confirmados por COVID-19 a quienes deben asistir o trasladar a hospitales.
“Actualmente son las emergencias que más estamos atendiendo pues nos llaman para trasladarlos a algún hospital, pero la mayoría están saturados y no tenemos otro lugar al cual llevarlo y en ocasiones los familiares se molestan”, lamentó.
