Francisco anunció la creación de una comisión para analizar la posibilidad de autorizar a las mujeres ser diáconos.
El anuncio se realizó durante un encuentro en el Aula Paulo VI del Vaticano ante 900 líderes de congregaciones religiosas femeninas de todo el mundo que asisten a la asamblea trienal de la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG).
El pontífice respondió de forma improvisada a seis preguntas que le lanzaron las presentes, una de las cuales le preguntó la razón para no construir una comisión oficial que estudiase dicha cuestión.
"¿Constituir una comisión oficial que pueda estudiar la cuestión? Creo que sí. Sería bueno, para hacer que la Iglesia aclare este punto. Estoy de acuerdo, voy a hablar para hacer algo como esto. Acepto, me parece útil tener una comisión para aclarar", añadió.
Francisco reconoció que había abordado el tema hacía años con un profesor, quien tenía estudios sobre el uso de las mujeres diáconos durante los primeros siglos de la Iglesia.
Bergoglio reconoce que a la fecha no está claro el papel de las mujeres entonces, ni quiénes eran o que ordenación tenían.
La Iglesia Católica reserva el diaconado a los hombres, los seminaristas son ordenados diáconos temporales antes de recibir la ordenación sacerdotal, aunque existe otra categoría de diáconos permanentes que incluso pueden estar casados.
Los diáconos no pueden celebrar misa ni confesar o dar la unción de los enfermos.
