El arzobispo de Antequera-Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos pidió ayer a los católicos rogar a Dios para que los sacerdotes sean buenos pastores porque son imperfectos y pecadores como cualquiera.
“Ayúdenos a ser lo mejor en la vida. Compréndanos, a veces deben de tener mucha, mucha paciencia”, asentó.
En la homilía de la misa dominical oficiada en la Basílica Menor de Nuestra Señora de La Soledad, en ocasión del Año Jubilar, el mitrado sostuvo que como pastor no es un hombre perfecto, ni viene de una familia perfecta, porque tiene tantos defectos como todos.
“Pero mi cargo me exige cierta forma de comportarme que no se me debe de olvidar y me lo exige Dios y me lo exige la comunidad. Siempre he sentido, a lo largo de toda mi vida y mi ministerio que el pueblo santo de Dios quiere tener pastores santos, perfectos, sin errores y sin equivocaciones. Y eso no hay aquí en la tierra”, señaló.
Por eso, llamó a los creyentes a acordarse de sus pastores en sus oraciones a Dios para que sean santos.
“¿Se acuerda de mí en su oración?, ¿le dice a Dios, ‘quiero que mi arzobispo y mi sacerdote sean santos’?”, cuestionó.
Reconoció que algunos sacerdotes como popularmente se dicen la “riegan”, porque se les suben los apellidos y se enojan por cualquier cosa.
“A veces somos majaderos, a veces somos mal hablados, los humillamos, los insultamos y les decimos tantas cosas que les hieren, que les duelen y que no esperaban escuchar de un sacerdote, porque de los labios del sacerdote sólo esperan escuchar que les hablen de Dios. Y a veces los sacerdotes, no se dedican a hablarles de Dios, sino de otras cosas”, refirió.
Incluso, subrayó que los errores cometidos por los sacerdotes causan escándalos en la comunidad.
“No voy a tapar el sol con un dedo, somos malos pastores pero a veces se dice de más, nos destruyen, nos acaban, nos difaman, cualquier persona puede acabar conmigo diciendo algo que yo nunca he hecho y puede acabar con esta Iglesia Católica de Oaxaca”, agregó.
Sin embargo, observó que muchos sacerdotes llenos de defectos son acusados y difamados injustamente, porque los católicos no ofrecen pruebas.
“Con frecuencia escucho acusaciones, pero cuando yo cuestiono a las personas que vienen a decirme tantas cosas de los sacerdotes, les pregunto ‘¿usted ha visto todo esto?, ¿es testigo?, ¿me puede dejar aquí un testimonio firmado de usted, con su domicilio y todo?, me responden ‘no a mí me dijeron, mi comadre me dijo’. Y a veces vienen conmigo los sacerdotes y me dicen ‘señor arzobispo ya no aguanto, ya no puedo, lléveme a otra parte, estoy desgastándome de más, es un montón de cosas que dicen que yo no he hecho, que no estoy haciendo’”, asentó.
Ante esto, Vázquez Villalobos convocó a los creyentes a rogar a Dios para que los sacerdotes sean buenos pastores y cultiven en sus comunidades los sentimientos de caridad, de misericordia, de bondad, de solidaridad, de fraternidad.
“Mírenos con misericordia, mírenos con el perdón. No sean tan crueles al juzgarnos, mírenos con ternura, mírenos con amor, como nos mira Dios y la Madre de Dios. Queremos ser buenos pastores, pero ayúdenos, solos no podemos, solo con la ayuda de Dios”, finalizó.
