El director general de Reinserción Social de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), Juan José Rodríguez Molina, aseguró que los centros penitenciarios del estado operan con gobernabilidad y descartó la presencia de cualquier forma de autogobierno en los reclusorios.
Para mantenerlo, dijo, se ha establecido una estrategia de atención a las personas privadas de su libertad a través de los directores de los penales. El objetivo, según explicó, es conocer las inquietudes de los reclusos y darles solución ya sea a través de las personas a cargo o a través de la Dirección General con mayores condiciones para darles respuesta a sus peticiones.
“Pero es muy importante siempre la cercanía y la proximidad en ese sentido, para garantizar las condiciones de gobernabilidad”.
El sistema penitenciario de Oaxaca está dentro de los peores del país, por las bajas calificaciones obtenidas en las inspecciones realizadas cada año por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Al respecto, Rodríguez Molina aceptó que cuando recibieron las cárceles del estado por la nueva administración de gobierno, sí advirtieron deficiencias en la materia de infraestructura, normatividad y atención a los reclusos.
“Desde que se tomó el encargo por la subsecretaria y su servidor, la disposición ha sido la atención inmediata del sistema penitenciario para modificar y reforzar la infraestructura en sus 16 centros de reclusión, que son 13 para adultos, tres especializados: el femenil, el psiquiátrico y el de menores”.
Reconoce rezagos
Sobre la violación a los derechos humanos para que las personas privadas de su libertad tengan un espacio digno, recalcó que principalmente encontraron una falta de mantenimiento y pintarlos nuevamente; asimismo, dijo que debe mejorarse la red “hidrosanitaria” y eléctrica.
El funcionario de la SSPO sostuvo que no tienen registro en ninguno de los penales lo que se llaman Mesas Directivas, formas de auto gobierno que se tenía intramuros en las cárceles.
En los operativos que han realizado, sin embargo, han decomiso sustancias prohibidas o drogas ilícitas; principalmente en la Penitenciaría Central del Estado, que se encuentra en el municipio de Santa Lucía del Camino, en el reclusorio de Tehuantepec y en el de Pochutla.
“Es nuestro trabajo estar previniendo que no se introduzcan estas sustancias prohibidas ni objetos prohibidos. Sabemos que tenemos personas privadas de su libertad que están siempre pensando como introducir algún objeto y sustancia prohibida”.
Hasta ahora, afirmó, no se ha encontrado responsabilidad de ningún funcionario o servidor público en la introducción de drogas o armas en el interior de los penales.
