Si el Comité Ejecutivo Nacional designa un delegado especial con funciones de presidente estatal sin el consenso de todas las fuerzas y actores políticos, el PRD entrará en una grave crisis de división interna y de litigios en los tribunales electorales, advirtió el coordinador de la fracción parlamentaria de ese instituto político en la 62 Legislatura local, Jesús López Rodríguez.
El diputado, uno de los aspirantes a ocupar la dirigencia estatal, dijo que si bien los estatutos contemplan la designación de un delegado especial cuando no exista alguna instancia partidaria, en Oaxaca está funcionando el Consejo Estatal, el órgano encargado de elegir al presidente interino, ante la dimisión del ahora diputado Carol Antonio Altamirano Toledo.
“Eso sería lo correcto si todos queremos la unidad para que el PRD salga del hoyo donde se encuentra”, remarcó.
De lo contrario, subrayó que la designación de un delegado especial agravaría las discrepancias internas y metería al PRD en una dinámica de litigios en los tribunales electorales.
Pues –asentó–, cualquier actor político que se sienta afectado podría recurrir a los tribunales y el delegado especial duraría poco en el desempeño del cargo.
“Sería desgastante para el partido”, recalcó.
Además, consideró que la mayoría de las fuerzas y actores políticos están de acuerdo con la elección de un presidente interino a través del Consejo Estatal y no con la designación de un delegado especial.
No obstante, destacó que todas las fuerzas y actores políticos necesitan sentarse a discutir la ruta de la elección en aras de la unidad para alcanzar un acuerdo sólidos, especialmente con quienes fueron orillados durante las pasadas elecciones locales.
