La muerte materna que Oaxaca reportó en la semana epidemiológica 19 de este 2023 la llevó a colocarse en el séptimo lugar de incidencia a nivel nacional, ya que acumula siete en lo que va de este año.
Son 175 mujeres quienes en este 2023 han muerto en territorio mexicano por causas asociadas al embarazo, parto o postparto, siendo únicamente seis entidades del país donde no se ha presentado esta problemática: Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Colima, Nayarit y San Luis Potosí.
Junto con Chihuahua, el estado de Oaxaca se encuentra en la séptima posición de muertes maternas en el país, con 32 defunciones en 2022. https://t.co/enBsB5PeSA
— Noticias Oaxaca NVI (@nvinoticiasoax) January 4, 2023
En contraste, Chiapas es la entidad donde la incidencia de muerte materna es la más alta con 16 fallecimientos, seguida del Estado de México con 15 y Jalisco y Puebla con 13 cada una.
En cuarto lugar se encuentran Veracruz y Guerrero con once muertes maternas cada una, mientras que en quinto lugar están Nuevo León y Chihuahua, con diez por entidad.
Baja California se ubica en sexto lugar por sus ocho defunciones.
Cifras de muertes maternas en Oaxaca durante 2021 igualan las del 2020| Oaxaca tiene la novena cifra del país, al acumular 38 muertes maternas, la misma cantidad que al cierre del 2020. De esta cifra 21 casos tenían un diagnóstico de COVID-19. https://t.co/waFBVpg4Y8 pic.twitter.com/3Q8UI64oXM
— Noticias Oaxaca NVI (@nvinoticiasoax) November 19, 2021
En comparación con las 243 muertes maternas que se registraron a la semana 19 del 2022, en este año hay una disminución del 27.9 por ciento, al presentarse 68 fallecimientos menos.
Son 41 de las 175 muertes maternas en el país se debieron a hemorragia obstétrica, la principal causa en la mayor parte del mundo que hizo que en 2014 llevó a las Organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud a implementar el proyecto Cero muertes maternas, en cinco países de Centro y Sudamerica.
Ambas organizaciones identifican que a la par de que se deben derribar las barreras de acceso y capacitando al personal para que pueda manejar la hemorragia obstétrica, se debe asegurar la disponibilidad de sangre para transfusiones y los medicamentos esenciales, pero empoderar también a las mujeres para que se respeten sus derechos.
Cada muerte materna tiene consecuencias para las familias, pero también en el desarrollo de los países.
