Nadia Altamirano Díaz
De las 405 muertes maternas con un diagnóstico positivo a COVID-19 que han ocurrido este año en el país, 18 corresponden a Oaxaca. La cifra convierte a la entidad en la octava a nivel nacional con la incidencia más alta.
Durante la pandemia por COVID-19 -del 12 de mayo de 2020 que se presentó el primer caso y hasta el 17 de octubre de este 2021, la Secretaría de Salud federal ha estudiado en el país a 101 882 mujeres con un embarazo o en post parto ante la sospecha de COVID-19.
De ese universo, 29.3% (29 mil 813 mujeres) han resultado positivas a COVID-19, pero en 610 las complicaciones fueron tales que ocasionaron su muerte, lo que equivale a una letalidad de 2.04%.
En esta pandemia los estados con las cifras más altas de mujeres en etapa gestacional positivas a COVID-19 son Ciudad de México con 5 mil 715, Nuevo León con mil 836 y Guanajuato con mil 795.
En este año en el país se han tomado muestras a 70 mil 712 embarazadas o mujeres en post parto, de las cuales 19 mil 245 resultaron positivas a COVID-19 y 405 fallecieron.
La Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud federal, en su informe semanal de mujeres embarazadas y puérperas bajo estudio por COVID-19, ubica a Oaxaca entre las 8 entidades del país que reportan entre mil 14 y 2 mil 167 casos sospechosos, pero es de las entidades que no supera los 805 casos positivos.
Es de las 3 entidades, junto con Yucatán y Guerrero, que reportan la mayor parte de los 890 casos en embarazadas indígenas positivas a COVID-19, incluyendo 20 decesos.
En el país se tienen en seguimiento 420 casos graves que requirieron hospitalización, 4 de ellos en Oaxaca. La edad media de mujeres embarazadas graves que requirieron hospitalización es de 27 años, pero hay desde 14 y hasta 49 años.
El 8.3% de las embarazadas hospitalizadas tenían obesidad, otro 3.6% diabetes, 9.8% requirió ingresar a Unidad de Cuidados Intensivos y 7.4% fue intubada.
A pesar de que la vacunación en mujeres embarazadas a partir de las 9 semanas de gestación comenzó en el país a partir de mayo pasado, desde la semana epidemiológica 30 la problemática se ha agudizado.
