Citlalli López Velázquez
Las cifras récord de contagios por el virus SARS COV2 (COVID-19) alcanzadas en la última semana, así como el exhorto de la Secretaría de Salud de Oaxaca (SSO), a suspender todo acto masivo, entre estos eventos políticos, sociales y fiestas patronales, no han desincentivado estas prácticas.
Desafiando tanto a la enfermedad como a los llamados oficiales, municipios como Chilapa de Díaz, Santa Inés de Monte, San Antonio de la Cal, Quiatoni, realizaron sus fiestas patronales, lo mismo militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), quienes en pasados días realizaron una caravana de proselitismo.
Así por ejemplo este fin de semana San Juan Lalana llevó a cabo su fiesta en honor a su santo patrón con la congregación de cientos de personas en la cancha de la localidad.
En Chilapa de Díaz realizaron su festividad con un jaripeo el pasado 17 de enero de 2022, así lo evidencia un video posteado en Facebook en donde se observan a personas sin el uso de cubrebocas y sin la sana distancia.
En esa misma fecha en San Antonio de la Cal se llevó a cabo la coronación de la reina de la fiesta patronal en honor a San Antonio Abad. La actividad se realizó en la explanada del palacio municipal con la quema de torito, regada de dulces y bailes con monos de calenda. En la celebración también se congregaron cientos de personas para la quema del castillo.
En la fiesta patronal La Lobera Santa Inés del Monte, Zaachila, además de la calenda, realizaron la quema del castillo y un baile. En Quiatoni los festejos se desarrollaron el 14 y 15 de enero.
El pasado 10 de enero, la SSO emitió un oficio dirigido a las autoridades municipales en donde explicaba del riesgo de incrementos de contagios. En ese momento se contabilizaban mil 126 casos activos. Para el 21 de enero, es decir 11 días después el número ya era de 6 mil 317 casos.
En el documento la dependencia puntualizó que desde entonces no existían las condiciones de salubridad necesarias, que permitieran la realización de actos en donde hubiera presencia masiva de personas en espacios cerrados, o en espacios abiertos donde no fuera posible mantener la sana distancia.
En este sentido llamaron a la suspensión de actividades no esenciales, a fin de mitigar la cuarta ola que cobra mayor fuerza, con la presencia de 16 variantes que circulan.
Además, señala que en caso de que no se cumpliera con la solicitud planteada, como autoridades municipales estarían incurriendo en responsabilidades sancionables por el Congreso del Estado en los términos que establece la Ley Orgánica Municipal del Estado de Oaxaca y demás normatividad que resulten aplicables.
Asimismo, incurrir en la comisión de acciones probablemente delictuosas, como es la contemplada en el Artículo 193 Fracción I del, Código Penal de Oaxaca, que establece, la prisión de uno a seis años, al que intencionalmente propague cualquiera otra enfermedad sean cuales fueren los medios de que se valga.
