VILLA DE ETLA, Oaxaca.- El cierre definitivo del tiradero de la Villa de Zaachila es una oportunidad para que los 26 municipios de Valles Centrales pongan a prueba propuestas de solución microrregional sobre el manejo de residuos sólidos; pero en este municipio únicamente han demostrado que éste es un problema ambiental y de salud pública que se apila a cielo abierto.
"Esto no es un basurero, no cumple con las normas sanitarias y ambientales", expresa con firmeza Carlos Martínez, quien es el secretario del comité vecinal de la Colonia Lázaro Cárdenas, que junto con la de Peña Chica circunda el tiradero a cielo abierto que la autoridad municipal habilitó detrás del panteón municipal y el centro de readaptación social.
La tierra y un intento de composta ocultan las tiras metálicas que décadas atrás sirvieron de riel para el paso del ferrocarril. Al oeste se miran las parcelas secas de un ciclo agrícola que terminó, escasas construcciones y la Escuela Secundaria Técnica 201 y el templo de Las Peñitas de Reyes, Etla, municipio vecino.
A este tiradero se puede entrar desde cualquiera de los dos accesos este del panteón municipal, ya que el bardeado está incompleto y se carece de vigilancia que evite que cualquier persona llegue a depositar sus desechos.
Los gritos de personas recluidas que juegan en la cancha del centro de readaptación social se escuchan a lo lejos, junto con garzas que revolotean y se posan en los escasos árboles; pero lo que domina son los gruñidos y ladridos de perros sin dueño que encuentran en la basura un festín del cual alimentarse.
Cinco años atrás, el ex presidente municipal Elías Roberto Mendoza Pérez, recuerdan los vecinos inconformes, abrió un supuesto centro de reciclaje, con lo que se justificó la instalación de una galera con techo de lámina y piso de tierra donde no hay rastro que labore alguien.
"El municipio nos pide que separemos la basura e incluso revisan las bolsas, pero aquí todo está revuelto", expresa Carlos Martínez al mostrar la base de una montaña de desechos sólidos donde lo mismo hay llantas, botellas de plástico, empaques de tetrapak o restos de aparatos electrodomésticos, lo que les hace sospechar que además de la basura de esta población, también llega la que se genera en algún otro municipio.
Al anunciarse, en marzo pasado, un posible cierre del tiradero de la Villa de Zaachila a donde la Villa de Etla y otros 25 municipios de Valles Centrales, incluyendo Oaxaca de Juárez, acudían a depositar sus desechos, aquí se reactivó el uso de un predio para acumular la basura de toda la población.
“Los vecinos expresamos nuestra inconformidad y en mayo las autoridades se llevaron toda la basura, hasta simularon un tequio y prometieron que la zona sería un área verde, pero todo fue fingido”, reprocha Carlos Martínez.
En julio pasado, el tiradero de Zaachila fue reabierto sólo por tres meses y sólo aceptó los desechos de cinco municipios, incluido Oaxaca de Juárez, para cerrarse de manera definitiva el 8 de octubre pasado.
El 1 de noviembre pasado, autoridades estatales y de Oaxaca de Juárez anunciaron la solución a la problemática de la basura con la adquisición de un predio, pero un mes después no se ha concretado ningún relleno sanitario para ese o cualquier otro municipio.
“Yo creo que habrá unas 200 toneladas o vaya usted a saber”, especula Crescencia López, quien junto con su vecino Marcos Martínez Miguel resienten el aumento de fauna nociva, moscas y malos olores.
“Huele mucho a choquía”, dice Marcos, en un intento de describir ese olor a podrido que es la parte visible de un problema que se está filtrando a los mantos acuíferos y que puede demorar mucho tiempo y requerir mayor inversión para sanearlo que la instalación de un relleno sanitario que cumpla con las normas ambientales.
Felipe Reyes Pérez está seguro que si los restos de fruta, verduras, arbolado y desperdicios de comida que se apilaron desde hace cinco años realmente fueran una composta, serviría de abono; pero, “no lo han podido mover porque está todo revuelto”.
Junto con el internado Ignacio Mejía y el Centro de Estudios de Bachillerato, a menos de un kilómetro a la redonda también se encuentra el Jardín de Niños Porfirio Díaz que se reservan su opinión por una buena relación que mantienen con el presidente municipal Miguel Ángel Martínez Merlín y la regiduría de Educación, como este medio pudo comprobar al consultarles.
Cansado de descalificaciones y temerosos de posibles represalias, los vecinos no han querido impedir el ingreso de más desechos a tiradero a cielo abierto porque están seguros que esta lucha no debería existir si desde casa existiera una cultura ambiental que reduzca el consumo de plásticos y otros materiales de un sólo uso o que la autoridad municipal asumiera a conciencia su responsabilidad de manejar los desechos sólidos urbanos
Solo en el papel
Ley general para la prevención y gestión integral de residuos, reformada en 2015 para garantizar un medio ambiente sano.
La Norma Oficial Mexicana 083 -SEMARNAT-2003 especifíca lo referente a la selección del sitio, diseño, construcción, operación, monitoreo, clausura y obras complementarias de un sitio de disposición final de residuos sólidos urbanos y de manejo especial.
Se cuenta con una Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos del Estado de Oaxaca.
- 30 de 570 municipios cuentan con relleno sanitario: Semaedeso
- 8 de octubre pasado cerró el basurero en Zaachila
- 26 municipios de Valles Centrales resultan afectados por el cierre
