Aunque se regalan sillas de ruedas, bastones, aparatos auditivos y despensas a las personas con discapacidad en el estado, María Josefina Andrade Vargas, representante legal de la Casa Hogar Acéptame Como Soy, afirma que las acciones que deben implementar las autoridades son la sensibilización, trabajar en temas de movilidad y capacitar a las instituciones educativas para que acepten a personas de este sector.
“Sensibilizar es la primera opción. Enseñarles a las personas y sector público que hay formas correctas de dirigirnos a las personas con discapacidad, que tenemos que permitirnos convivir con ellos. Para que funcione la inclusión, debe haber una organización previa”, aseguró.
Subrayó que se tiene que capacitar a la sociedad de la presencia de las personas con discapacidad que son parte de la diversidad que hay en la comunidad, y el trato respetuoso que se merece la población.
La directora de esta asociación civil que atiende a personas con discapacidad intelectual lamentó que actualmente no haya voluntad de las autoridades para apoyar y visibilizar a este sector de la población, principalmente en Oaxaca.
María Josefina relató que recientemente ella y otras personas con discapacidad que fueron llamadas a las oficinas del Sistema DIF Estatal, sufrieron un trato discriminatorio por parte del personal de esta institución, por lo que urgió la sensibilización.
Mencionó que algunas autoridades simulan el apoyo e inclusión, ya sea proponiendo algunas reformas a las leyes, pero sin cumplirlas, puntos de acuerdo sin darles seguimiento o regalando productos sin cuestionarse si eso es lo que en realidad necesitan.
“¿Por qué no abrí los ojos y entender que es importante abordar las problemáticas de las personas con discapacidad desde una mirada progresista?, desde respetar la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, pero ¿por qué insistir en atenderlos con modelos asistencialistas que no ayudan a nadie? de esta manera saldríamos ganando todos”, aseguró.
María Josefina Andrade afirma que las acciones que propone para que implementen las autoridades no necesitan grandes inversiones, pues en el caso de sensibilizar únicamente es decirle cómo referirse correctamente a las personas con discapacidad sin utilizar términos peyorativos.
En el caso de abrir las escuelas a este sector de la población, se deben hacer pequeñas adecuaciones a los espacios como rampas y sentar a las y los niños que acudan a la escuela hasta enfrente para facilitar su vista y movilidad.
“Sólo se necesita voluntad política de decir ‘empecemos a trabajar’, no se deben hacer grandes desembolsos. A los maestros se les exige una atención precisa y responsable cuando no tienen los recursos humanos que les apoye en la tarea, por lo que atender a niños y niñas con discapacidad se vuelve un reto”, manifestó.
Aseguró que en los libros de texto y actividades, se debe comenzar a incluir temas de los tipos de discapacidades que hay para que las personas estándares creen consciencia de que la sociedad es diversa.
La directora de la Casa Hogar Acéptame Como Soy subrayó que la falta de movilidad es un tema que urge atender ya que aunque hay historias de personas con discapacidad que logran encontrar un trabajo o acudir a la escuela, deben abandonarlo debido a la falta de una ruta y vehículo adecuado para su escuela.
“Hay personas con discapacidad que consiguen un empleo, pero la falta de un transporte accesible provoca que utilicen taxis que vayan por ellas a sus casas, generándole gasta dos terceras partes de su sueldo”, lamentó.
Destacó que el que haya un transporte público adecuado y suficiente, rompe con el aislamiento y retraso en el desarrollo de las personas con discapacidad, pues aunque sí hay quienes han podido estudiar, moverse y sobresalir, es una pequeña minoría.
“No queremos quedarnos en regalar despensas, sillas y todos esos productos, porque sino, no vamos a avanzar y por muchas generaciones”, advirtió.
