Trabajo doméstico no remunerado aporta más del 26% del PIB en México | NVI Noticias Pasar al contenido principal
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Trabajo doméstico no remunerado aporta más del 26% del PIB en México

Foto(s): Emilio Morales Pacheco
Nadia Altamirano Díaz

Si en vez de asear su pequeña casa, preparar alimentos, lavar la ropa y responsabilizarse de los cuidados de su hija de 12 años y de su hijo de seis años, Mariela contratara a una persona para poder salir a trabajar, tendría que destinar al menos 250 pesos diarios y todavía tendría que llegar a realizar algunas actividades después de su jornada laboral.
Este valor económico que realiza la población mayor de 12 años equivale al 26.3  por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el país.

“Me ganó el amor. No podía disponer del tiempo de mi mamá o de mi suegra para que se hicieran cargo de mi hija mayor, así que alguien se tenía que quedar en casa”, cuenta una mujer de 36 años que, sin estar formalmente casada con su pareja Sebastián, aceptó que sea él quien trabajara.

Este lunes el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) dio a conocer los resultados de la Cuenta Satélite del Trabajo No Remunerado de los Hogares de México 2021 que permite saber que el valor económico de las labores domésticas y de cuidados anual en México equivale a 6.8 billones de pesos.

Este valor económico que realiza la población mayor de 12 años equivale al 26.3  por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el paísNacional (PIB).

Cuando se comparan las labores domésticas y de cuidados en el hogar que realizan los hombres contra el de las mujeres, ellas son las que aportaron 2.6 veces más valor económico que los hombres.

A comparación del 2020 que la mayoría de actividades fuera de casa se realizaban de manera remota o virtual, como las clases de los diferentes niveles educativos por la pandemia de COVID-19, durante 2021 aumentó el tiempo destinado a traslados y acompañamiento, así como a actividades o labores domésticas, mientras que el tiempo para apoyo escolar y ayuda a otros hogares disminuyó.  

“Debo trabajar aquí en casa"

Sin un padre que se responsabilice de sus deberes económicos ni busque convivir con su hijo de ocho años, Samantha sólo puede pagar una vez por semana a una empleada doméstica que le ayude a limpiar su casa y doblar la ropa que ella a lavar el fin de semana.

“Debo trabajar aquí en casa, hacerme cargo de mi hijo y también en el despacho, pero sólo puedo estar mientras él está en la escuela, si tengo alguna junta, me lo llevo y para que todo no esté tan tirado, pues le resto horas a mi sueño y ni pensar en ir al gimnasio o hacer algún tipo de ejercicio”, admite sin quejarse.

En cambio en la casa de Javier y Alma, aunque él es el único que trabaja fuera de casa, todas las noches le toca preparar la cena y limpiar la cocina, además de que el domingo se encarga de preparar todos los alimentos.

“Tengo dos hijas y yo no quiero que elijan a hombres machistas, así que asumir quehaceres en la casa casi al igual que su mamá, es una manera de educarlas”, cuenta Javier, quien tiene claras las inequidades, aunque ignora que el valor económico neto del trabajo no remunerado en labores domésticas y de cuidados equivalente a 51 mil 425 pesos por persona, pero en el caso de las mujeres es de 71 mil 524 pesos anuales y de los hombres es de 28 mil 831 pesos.  

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