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"Sin la voz de las mujeres no puede haber justicia": Arturo Zaldívar

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Foto(s): Cortesía
Citlalli López Velázquez

Sin las voces de las mujeres no puede haber una reforma judicial, señaló el exministro Arturo Zaldivar Lelo de Larrea al encabezar el foro Mujeres y Justicia realizado en Oaxaca y que representa el tercero de la jornada Diálogos por la Transformación convocados por Claudia Sheinbaum, precandidata de Morena, Partidos del Trabajo y Verde Ecologista.

Actualmente la reforma judicial es uno de los temas principales de la agenda pública luego de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador anunciara que presentará una propuesta el próximo 5 de febrero para que magistrados, ministros y jueces sean electos por voto popular, propuesta que no es del todo compartida por el ministro en retiro, quien considera que ésta debe de darse a partir de una elección indirecta.

Durante su visita por Oaxaca, el jurista y catedrático, destacó que además de lo anterior, la reforma necesariamente tiene que pasar por transformar las fiscalías locales, las cuales, reconoció que han quedado a deber a las mujeres víctimas de violencia familiar y feminicidio. 

 

 

“Si no hacemos una reforma profunda a las fiscalías, esta violencia va a seguir avanzando. Mientras estamos platicando aquí, están matando a mujeres en este país, eso no lo podemos seguir permitiendo, tenemos que seguir denunciando y tomar medidas”, destacó el ministro en retiro como moderador.

En Oaxaca el panel reunió a mujeres destacadas en distintos ámbitos como Berenice Ramírez Jiménez, presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca (TSJO); María Luisa Salazar Olvera, Coordinadora del área de delitos de género del CEDEHM; Yesica Sánchez Maya directora de Consorcio Oaxaca; Jessica Marjane, activista trans de la Ciudad de México; Guillermina Juárez, coordinadora de Mano Vuelta; Katy Salinas Pérez, titular del Instituto Coahuilense de las Mujeres; y Ana Fátima López Iturríos, abogada feminista.

Durante el encuentro las ponentes plantearon sobre la mesa la serie de dificultades, trabas y violencias que enfrentan las mujeres en todos los ámbitos, de todas las edades y en todo el territorio nacional, compartiendo principalmente la preocupación por el feminicidio y la falta de acceso a la justicia.

 

 

Luego de señalar que la violencia familiar es una de las que causa mayores estragos e incluso es la antesala al feminicidio, Salazar Olvera señaló que en el 95 por ciento de los casos en donde se privó de la vida a una mujer, tuvo un antecedente de mala atención por parte de las autoridades.

En Oaxaca de 2016 a la fecha suman 838 feminicidios; 730 del sexenio pasado. En el actual hay un promedio de 9 mujeres asesinadas por mes, agregó Sánchez Maya.

En su oportunidad Jessica Marjane destacó las cifras de transfeminicidios que sólo en este 2024 suman seis. Agregó que México es uno de los países con mayores crímenes de odio.

 

 

 

Víctima de violencia señala a diputada como agresora 

Durante el foro, Ana Laura Carrasco Ayala, víctima de violencia, señaló públicamente a la diputada local y presidenta del movimiento 50 más 1, Mariana Benítez Tiburcio como una de sus principales agresoras.

“Me da vergüenza que haya puesto aquí un pie Mariana Benítez Tiburcio que cuando ocupó cargos públicos jamás hizo nada por las mujeres y ella es una de mis principales agresoras silenciosas (…) con qué calidad moral se presenta aquí cuando nunca en la vida me quiso escuchar siquiera porque es amiga de mis agresores quienes están libres allá afuera”, indicó minutos después de que la legisladora abandonara el auditorio en donde se llevaba a cabo el foro.

Carrasco Ayala también acusó omisión y violencia institucional en su contra a raíz de un juicio de paternidad interpuesto por su hija Andrea Miranda en el año 2017. Afirmó que todas las instancias han jugado en su contra para proteger a su agresor. “Para mí la peor violencia ha sido la institucional porque ha llevado a todo tipo de demás violencia”

La denunciante afirmó que, debido a la falta de atención en su caso, su vida está en riesgo, pues incluso fue objeto de un atentado. “Quisieron dañar mi salud mental y no pudieron, quisieron asesinarme y les falló por milímetros en el trayecto de mi la salida del trabajo del Poder Judicial del Estado de Oaxaca, por eso hoy estoy aquí de pie”.

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