Motivados por el respeto al agua y contribuir a minimizar la huella ambiental, Indira y Daniel fundaron Silvestra, iniciativa dedicada a la construcción de baños secos composteros como la alternativa ecoamigable.
Silvestra no solo busca eliminar el uso de agua en los sanitarios, sino de fomentar un cambio de perspectiva hacia este recurso vital. Pretende devolverle al agua su carácter sagrado, reconociendo su papel esencial en la existencia y la vida cotidiana.
Creado hace tres años, Silvestra “surge a partir de una necesidad de priorizar que tu trabajo y forma de vida no tenga un impacto más en el medio ambiente, viendo esa necesidad de contribuir y, por el contrario, amortiguar el cambio climático es que decidimos investigar más y adecuarnos a esta ecotecnia de baños secos composteros”, explicó Indira.
Estos baños, además de ser económicamente accesibles, ofrecen un impacto ambiental casi nulo. La tecnología utilizada se basa en procesos bioquímicos simples que promueven la descomposición orgánica.
El servicio ofrecido por Silvestra incluye la recolección de desechos en botes especiales, denominada "La Ruta de la Caca". Esta recolección se realiza en casos donde las personas no tienen el tiempo o el espacio para compostar en casa. Silvestra se encarga de llevar estos desechos a su espacio para su compostaje.
La iniciativa destaca la versatilidad de los baños secos y la posibilidad de adaptarse a diferentes necesidades y circunstancias. Además, se enfoca en la conciencia y el autoconocimiento, promoviendo la idea de que las heces no son simplemente desechos, sino una extensión de nuestro propio cuerpo.
“En gran medida el agua está siendo utilizada como una banda transportadora de desechos en el peor de los casos, en el mejor de los casos se le mal llama un recurso natural como un elemento pasivo que está ahí para el uso, disfrute y explotación de la humanidad. Eso es una forma utilitaria, una forma totalmente de dominación hacia los elementos, hacia el agua en este caso”, destacó Daniel.
El ser humano -expuso- ha olvidado que el 70 por ciento de su cuerpo se compone de agua y ésta en algún momento estuvo en los océanos o ríos, cuerpos de agua que también han sido contaminados.
El agua no se está acabando -apuntó- el agua siempre es la ha sido la misma cantidad en el planeta, pero se ha ido contaminando, alterando su calidad y su forma porque no hay un respeto, “no hay una visión de cuidado, no hay una visión de que esa agua eventualmente va a formar parte de nuestros cuerpos y de nuestras relaciones y de nuestra salud”.
En un contexto más amplio, Silvestra aborda la crisis multidimensional que enfrenta la humanidad, incluyendo aspectos ambientales, sociales y económicos. Los fundadores instan a tomarse en serio la situación actual, reconociendo la urgencia de abordar temas como el cambio climático y la extinción masiva.
A través de Silvestra, estos jóvenes buscan recordar a la sociedad la preciosa oportunidad de vida que aún tienen, aprovechando la riqueza natural que ofrece el estado de Oaxaca. Con la esperanza de inspirar un cambio en la perspectiva y el comportamiento cotidiano, Silvestra se presenta como una propuesta práctica y consciente para el respeto al agua y al medio ambiente.
El dato
La tecnología utilizada se basa en procesos bioquímicos simples que promueven la descomposición orgánica.
