SANTA MARÍA HUATULCO, Oaxaca.- Un municipio saqueado, sin expedientes financieros, técnicos ni obras visibles, palacio municipal en ruinas y con un vacío de poder que caló durante seis años a la población, así reciben el municipio de Santiago Xanica las nuevas autoridades que encabeza la alcaldesa Miriam Díaz Luis.
A escasos días de haber tomado las riendas de la administración y en el contexto de la revisión de obras que debieron realizarse con los recursos extraordinarios otorgados por el gobierno federal para reconstrucción de infraestructura local, luego del paso del huracán Ágatha, Díaz Luis afirma que enfrenta un gran reto porque prácticamente está iniciando desde cero su mandato, sin antecedentes de la forma en que se habrían aplicado los recursos, ni trabajos visibles, aunque sí con la preocupación de ciudadanos que vieron el inicio de obras prometidas que nunca se concluyeron.
En el marco de la visita del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador a la Costa, donde informó a ediles de los 31 municipios que fueron beneficiados con recursos que van de los 20 a los 50 millones de pesos, que habrá un próximo diagnóstico a través de asambleas ciudadanas, encabezadas por el gobernador Salomón Jara y la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, la mandataria local consignó que es necesario y justo que los ediles rindan cuentas de la forma en que aplicaron los recursos y que en caso de ser necesario, se les apliquen las sanciones correspondientes.
Que autoridades atestigüen que no aplicaron recursos
“Felicito al presidente Andrés Manuel por la idea de que se recorran los municipios para que atestigüen que en realidad el recurso no fue aplicado y escuchen el sentir de cada ciudadano de las localidades. Ojalá la federación se encargue de hacer lo correspondiente en el caso de las obras que supuestamente se programaron y no fueron ejecutadas”, afirmó.
Informó que hasta el momento, Aída Hernández Moreno, expresidenta de Xanica, está ilocalizable y no se ha acercado a las nuevas autoridades para explicar la situación de obras -tanto las que debió edificar con el ramo 33, como las que se derivan de los recursos de apoyo por el huracán, que en el caso de Xanica ascendió a 50 millones de pesos-, y en ningún momento tuvo la intención de hacer una entrega-recepción formal.
Miriam Díaz, quien hasta antes de ser la nueva edil, se desempeñaba como ama de casa y siempre mostró una vida comunitaria activa, destacó que es necesario que la federación aplique la ley para que los pueblos no se queden en la incertidumbre con obras que debieron concluirse y no existen físicamente, como la que supuestamente se ejecutaría en la cabecera municipal para resolver el abasto de agua y que presuntamente fue concluida, sin que haya tal infraestructura que es vital para la ciudadanía.
