Octavio Vélez Ascencio
En la festividad del Bautismo del Señor, el arzobispo de Antequera-Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos admitió ayer que enfermó de coronavirus COVID-19 durante el año pasado y por eso, llamó a los creyentes a creer en la existencia de la pandemia, ante la nueva ola de contagios.
“Yo también estuve contagiado, lo confieso públicamente, a mí no me han platicado”, asentó.
En la homilía de la misa oficiada en la parroquia del Señor del Encino de San Miguel Yahualica, Jalisco, su lugar de origen, el religioso sostuvo que los creyentes necesitan ser consolados en este tiempo de pandemia en el Espíritu Santo y no en otra parte, porque tal vez se enfermaron o porque tal vez murió algún ser querido.
“El Espíritu Santo es el consolador y vive en ustedes. Espero que después de tantos meses y también de años, todo mundo creamos en esto porque algunos todavía no creen que esto es verdad ¿y por qué se murió mi hermano? Mi hermano mayor se murió de COVID-19”, afirmó.
Sin embargo, expuso que gracias a Dios él pudo superar la pandemia y sobre todo, seguir viviendo, porque también enfermó de coronavirus.
“Si estoy hablando ante ustedes es porque Dios me concedió que siguiera viviendo, yo también lo viví pero Dios no me quiso llevar y tal vez por algo, porque tenía que venir a Yahualica, porque tenía que estar aquí y porque tengo que regresar a mi Oaxaca, donde yo vivo, donde yo trabajo, donde yo ejerzo mi ministerio”, anotó.
Por eso, llamó a los creyentes no dudar de la nueva ola de contagios, por ser una realidad, sobre todo, por la llamada recibida de un sacerdote de la Arquidiócesis de Antequera-Oaxaca, para reportar el requerimiento de la autoridad civil.
“Un sacerdote de mi arquidiócesis me llamó y me dijo ‘monseñor, ¿qué vamos a hacer? La autoridad civil de la comunidad donde estoy me acaban de enviar un oficio para que cierre el templo, porque han aumentado los contagios en este lugar’. Y yo le dije ‘no cierres porque nuestro pueblo necesita encontrarse con Dios, pero tengan el cuidado debido’. Esto está creciendo”, agregó.
Además, convocó a los creyentes a no sentirse grande por tener dinero, ni por ser un profesionista, ni una persona preparada, ni por tener facilidad de palabra o por su belleza.
“No, su grandeza y de la persona que está enfrente de usted y que en este momento está delante de usted, detrás de usted o en un lado, se le da por ser hijo adoptivo de Dios. El que está a su lado es grande por ser hijo de Dios, usted es grande por ser hijo de Dios, pero no ande midiendo su grandeza porque yo tengo dinero y tú no tienes, porque yo sé y tú no sabes”, añadió.
De la misma manera, suplicó a los católicos no levantar las manos, ni abrir sus labios para herir a sus hermanos, porque están hiriendo a un hijo de Dios.
“No se manche sus manos de sangre, no se marque con el cuño de Caín, respete a su hermano, usted no es dueño de la vida de él. El dueño es Dios, sólo Dios, usted no, no le quite la vida”, señaló.
Aparte de esto, pidió a las mujeres no matar a su hijo en el vientre, porque tiene el derecho a vivir.
“Tiene el mismo derecho que usted tuvo de que su madre lo diera a luz, también el que se está formando en su vientre tiene derecho a ver la luz, a ser como nosotros y un día ser hijo de adopción divina al ser bautizado”, apuntó.
Igualmente, Vázquez Villalobos solicitó a los creyentes no destruir su vida con vicios, especialmente con drogas, ni enriquecerse con dinero mal habido.
“Piense las cosas. Respete su vida y respete la vida del hermano. Viva como un auténtico cristiano. Dé Gloria a Dios en todo momento y camine imitando a Jesucristo, que pasó por la vida haciendo el bien. Eso haga usted, haga lo mismo, pase por la vida haciendo el bien”, terminó.
